GAME OVER
Autora: Hyspasia (@Hyspasia)
Estos vaivenes como los que sufrimos los últimos días nos angustian a nosotros, la gente de a pie.
Hemos vivido muchas veces esta situaciones y, aunque lo políticos digan misa, nosotros sabemos que nos van a perjudicar, porque los que tenemos nuestro presente, nuestro futuro y nuestro patrimonio acá somos nosotros. los políticos tienen su capital afuera. Dicho de otra manera: no son socios nuestros.
Podrán ser representantes nuestros, eventualmente. O ser subordinados de un mandatario electo (ejemplo: Aranguren o Dujovne), pero no son nuestros socios.
Lo que a nosotros nos beneficie o nos perjudique, a ellos no les hará mella. Lo dije en ABROAD.
Al no ser socios en las ganancias y pérdidas hace que nuestros intereses no estén alineados.
Problema que la población no tenía con Avellaneda o Quintana o de Alvear o Perón o Illia o el mismo Videla. Su presente, futuro y patrimonio lo tenían acá. Para bien o para mal.
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Hace días que nosotros, los de a pie, estamos angustiados.
Doy dos ejemplos:
Yo el 27 de abril de 2018.
Seren el 14 de mayo de 2018.
Es lo mismo. Es ver que una vez más tiraron todo nuestro esfuerzo a la basura por codiciosos, ignorantes, torpes, angurrientos y corruptos.
Y cuando es una acumulación de décadas, donde cada uno que viene no sólo es peor que el anterior sino que roba en dos años lo que el anterior robó en seis, uno se cansa.
También se cansa de anhelar. De anhelar que esta vez sí sea diferente.
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El gobierno actual ganó por la misma razón que ganan todos los candidatos de elecciones libres en el mundo: encuentran la forma de sumar voluntades.
Mauricio Macri obtuvo millones de votos. Hubo tantas razones para votarlo como individuos que lo votaron. Cada uno de nosotros votó por una razón diferente. Que pueden ser mutuamente excluyentes. Es más, uno puede votar por lo que el candidato prometió, por lo que un miembro del partido prometió (pero el candidato no lo hizo), por lo que uno cree que el candidato es o cree que va a hacer, e incluye anhelos sobre los cuales el candidato jamás emitió opinión. En fin: infinitas razones.
Hay gente que lo votó a Macri porque pensó que iba a acabar con la meseta de actividad económica de los últimos años de Cristina Fernández, porque iba a bajar los aranceles a la exportación, porque temía que “los otros” nos convirtieran en Venezuela, porque iba a acabar con el curro de los derechos humanos, porque iba a cortar con los planes “descansar”, porque iba a continuar con los planes sociales, porque iba a poner en caja el empleo público, porque iba a dejar todo como estaba, porque iba a hacer obra pública, porque iba a controlar los gastos, porque iba a acabar con la delincuencia, porque iba a poner coto en la justicia al curro del garantismo, porque iba a continuar con la política garantista.
En resumen: elige tu propia aventura. Cada uno votó por lo que quiso imaginar.
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Sin embargo, desde que asumió, el presidente se dedicó a dilapidar su capital político. Lo hizo con cuentagotas.
Con la única excepción de bajar las retenciones al campo, dejó todo como estaba, por lo tanto, provocando la insatisfacción de su electorado.
Y, al retrasar el tipo de cambio y aumentar el impuesto rural en la Provincia de Buenos Aires, lo que entregó con una mano (la baja de alícuotas de los derechos de exportación) lo sacó con la otra.
Aplicó la misma receta que usó durante ocho años en la ciudad: subir impuestos, endeudarnos, entregar propiedades de todos nosotros a IRSA y a otros amigos de él, gastar en obras pelotudas y aumentar la planta de empleados, no sólo en cantidad sino en precio unitario, al pagar sueldos por arriba del mercado laboral privado [1].
Se las arregló para malquistar a muchos de sus votantes:
- Le dio plata a manos llenas a piqueteros varios sin contralor alguno.
- No hizo auditorías con suspensión de pago de jubilaciones, pensiones y pensiones por invalidez fraudulentas.
- No removió a las personas contratadas por el gobierno saliente en los últimos 90 días de gobierno.
- No hizo auditorías sobre la planta laboral del estado en cuanto a calificaciones para cubrir el puesto (idoneidad según la Constitución Nacional), ni siquiera controló que vayan a trabajar o revisó las licencias por enfermedad truchas (es fraude al estado).
- Siguió con la política de “vivan los chorros”, llamada “garantismo”, tanto en la Nación, como en Capital como en Provincia de Buenos Aires, los tres distritos que ganó. La prueba de ello fue que convivió con Gils Carbó y Malala durante dos años, las dos cabezas de Justicia Legítima.
- Le salvó la piel a Rafecas, a Oyarbide, a Farah y a Ballesteros.
- No sólo siguió con la política de Derechos Humanos anterior, con generosas transferencias dinerarias y patrimoniales a Madres, Abuelas, H.I.J.O.S. y concuñados, sino que redobló la apuesta y nombró a la Argentina país “Afro”. Omitió incorporar a las víctimas del terrorismo en la década del ‘70 en su “nuevo” plan de DDHH hasta el año 2020 [2] [3].
- El trato con los pichones de terroristas pseudomapuches nos dejó a todos insatisfechos. Vimos un gobierno irresoluto, desinteresado y dispuesto a dejar a parte de la población a su suerte (desobedeciendo la obligación constitucional de consolidar la paz interior).
- El hundimiento del ARA SAN JUAN y la falta absoluta de empatía no sólo del presidente sino del Gabinete todo nos hizo pensar que la ausencia de interés en defender nuestro territorio (el octavo en dimensión del mundo) es, cuanto menos sospechosa.
- Aumentó notoriamente la presión impositiva.
- Los gastos abusivos son diarios.
Quedaron expuestos, primero por tuiteros como Abdón, luego pasaron a la televisión. La difusión de conductas reñidas con la austeridad republicana choca con el mensaje desde el poder: “ustedes tienen que pagar las tarifas lo que valen”. O sea ¿yo tengo que pagar la luz lo que vale, más un 38% de impuestos para que Peter Robledo se vaya a Nueva York o para que Avelluto baile el carnaval carioca en Bogotá? ¿A quién le ganaste, gil?
- La mismo consideración merecen los nombramientos. Gente subcapacitada, cuando no prontuariada, con sueldos que son cinco o siete veces lo que ganarían en el sector privado, si es que alguna vez consiguieran ingresar al mismo [3].
- Los dos primero años, mediante una alianza con el grupo Renovador de Massa en Diputados y con algunos gobernadores en el Senado, les permitió la aprobación de casi todas las leyes que presentaron. Sin embargo, al acercarse las elecciones de mitad de término se dedicaron a debilitar a su socio Massa para privilegiar el cuco de Cristina Fernández.
- Las causas contra Cristina Fernández, en particular las que tienen que ver con el asesinato de Nisman y el tratado con Irán, van lentas. Tan lentas como todo lo que hace Garavano, que parece más trabajar para el status quo que para el reclamo de un sector de la población. Garavano hace que hace. Nos entretiene con naderías mientras mantiene todo como está y administra la impunidad [4].
- No logró activar la economía argentina. Lo poco que se vio a nivel estadístico parece más motivado por la obra pública y el aumento de empleo público que por otra razón.
- No eliminó el impuesto a las ganancias sobre el salario cuando el salario NO ES GANANCIA.
- Al tener el tipo de cambio atrasado artificialmente destruyó (o terminó de destruir) las economías regionales, continuó con la desindustrialización del país y aumentó el problema de déficit de balanza comercial.
- Continuó todos y cada uno de los curros de Cristina Fernández con China. Las represas [5], las centrales nucleares, las bases militares, las minas de oro. Tampoco protestó por el puerto de China en la costa uruguaya, puerto que China usa para reaprovisionar los barcos pesqueros piratas. ¡Qué lindo todo!
- No existen palabras para describir la política del presidente frente a las Fuerzas Armadas. Peor aún que la del gobierno anterior.
- Sacó el tema del aborto cuando en campaña había prometido la postura contraria.
- Traicionó a Venezuela, a pesar de las numerosas promesas electorales.
- Erró en la alineación internacional. Una falta de profesionalismo del presidente y de la canciller. Persistió en el error aún luego de conocerse los resultados de las elecciones del Brexit y de Trump. Muy por el contrario, fue a hacer papelones a Bogotá junto a Castro en el plan Obama de lavar y planchar a las FARC. Esa mala praxis a todos los argentinos nos cuesta cara en nuestros bolsillos.
- Sospechamos que el presidente y gente de su entorno aprovechan la posición pública para favorecer negocios personales. No sólo está penado por ley sino que, peor aún, es moralmente reprochable. Tiene tres costos: uno, el que se pierde directamente con el curro (ejemplo, perdimos la propiedad de Esmeralda entre Santa Fe y Marcelo T. de Alvear que era de todos nosotros), dos, al cometer un delito, se vuelven vulnerables ante la cofradía de la Justicia Federal la cual está compuesta por una mafia que vive, entre otras cosas, de extorsionar a los miembros del poder ejecutivo, cualquiera éste sea, tres, cuando el país está complicado - nosotros lo estamos - uno necesita gobernantes que estén 7x24 dedicados al bienestar general. Un presidente, un ministro, un secretario que está pensando en su negocio y en armar un curro y en armar reuniones con la contraparte del curro, es tiempo que no dedica al bienestar general. Tal vez ése sea el mayor costo de los tres enumerados [6].
Di algunos ejemplos. Hay infinitos. Por lo que fuera, el gobierno perdió adhesiones. Unos porque el barrio está imposible con los chorros. Otros porque el negocio no camina. Otro porque le cambian las veredas cada tres meses y no le dejan dormir. Otro porque le aumentaron los impuestos. Otro, porque pensó que sus familiares presos iban a ser liberados. Otros porque todos los meses le sacan veinte mil pesos de impuesto a las ganancias y el presidente había prometido quitarlo.
Otros porque nos pasamos doce años comiendo mierda con la mano por culpa del kirchnerismo y pensamos que se iba a poner a los pingüinos en su lugar (perdidoso). Por el contrario, es evidente que en la justicia sigue mandando Justicia Legítima, que en todos los ministerios siguen todos los pingüinos, que la educación sigue con los mismos libros de texto y PakaPaka, que la televisión pública y radio nacional siguen con los mismos periodistas de siempre, que sigue Tecnópolis, que…
La gente no está decepcionada por lo mismo. Cada uno votó por su propia razón. Cada uno se decepciona a solas.
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Y que Peña no estaba a la altura de las circunstancias, lo que mostró sobradamente durante el caso Maldonado.
Tal vez retomen la iniciativa luego de parar la sangría de reservas de estos días. Tal vez se estabilicen nuevamente y más o menos se enderecen las cosas.
Lo que sí, la magia se acabó.
La magia se acabó cuando dijo que iban a pedir plata al FMI. Todos los argentinos sabemos lo que eso significa. Significan que nos van a sodomizar. Como hicieron siempre. Como hicieron con Grecia (último ejemplo).
Sabemos que significa que los mismos de siempre no pagarán la fiesta y los mismos de siempre la pagaremos. Significa un fracaso. Significa volver derrotado a la casita de los viejos. Significa “game over”.
Significa que el pacto entre Macri y nosotros se rompió. Y no fuimos nosotros los que lo rompimos.
Macri terminará su mandato. Si Cristina Fernández terminó su mandato luego de perder las elecciones de 2013 - lo que iba a ser su trampolín para modificar la Constitución - y luego del asesinato de Nisman, ¿por qué no lo va a terminar Macri?
Pero la relación entre él y el pueblo que lo votó, se acabó. Tendrá un núcleo duro, mayormente constituido por el gigantesco batallón de empleados públicos que él puso, pero la magia se acabó.
Para mí, ya ni sé qué día se murió. Creo que cuando se hundió el ARA San Juan, o cuando dejó respirar a Rafecas o con el caso Maldonado (Peña dijo en el Senado que si tenía que entregar gendarmes para descomprimir lo iba a hacer). No sé qué día sucedió, pero sucedió hace muchos meses. Para otros terminó el día de la reforma previsional. Para otros el día que llevó a presidentes extranjeros a tirar flores en el monumento a los terroristas.
Para muchos el día que dijo que iba al FMI. Como dijo Espert, "nos mandó al Fondo".
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Señores:
Esto es una carrera de largo aliento, de enduro. Nos bancamos a La Chorra, nos vamos a bancar esto.
Pero para los que estamos viejos, ver que son cuatro años más de Anguita en Radio Nacional, de tener manuales en las escuelas donde se enseña que la propiedad privada es relativa y que Sarmiento era un cretino, nos pone nerviosos. Porque le dejamos a nuestros hijos un país peor que el que recibimos.
Lo bueno es que en menos de dos años esta decepción se termina. Es bueno porque nos vamos dando cuenta que debemos rechazar toda forma de socialismo, ya sea el Socialismo SXXI de Kirchner-Chávez-Correa-Evo-Lula o la Socialdemocracia de Merkel-Macri. Todas esas formas de estado gigante, manipulación desde el estado desde el tipo de cambio a nuestra vida privada, a la educación de nuestros hijos, nos roba el presente, el futuro y el patrimonio. Lo que ha pasado estos dos años aclara el panorama, despeja los grises y nos hace ver que no es tan difícil lo que hay que hacer: volver a las fuentes. Volver a lo que fuimos no hace tanto.
Y como es una carrera de enduro, los presidentes pasan, pero nuestros deseos de vivir y de prosperar y de asegurar los beneficios de la Libertad para nosotros y para nuestra posteridad, permanecen. Y ¿saben qué? Prevaleceremos.
Y Macri, finalmente, terminó siendo uno más de los que construyeron escalones hacia abajo en este descenso paulatino al infierno que sufrimos.
Eso sí, a Macri, no le vamos a dedicar ningún Requiem. Paseará por tribunales como su antecesora.
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[1] Esto último tiene innumerables repercusiones, no sólo en las arcas públicas sino en la distorsión del mercado privado.
[2] De igual forma fue excesivamente tibio al condenar el ataque terrorista en Boston que resultó en el asesinato de cinco compatriotas. Como tenía que viajar a EEUU se dio una minivuelta por Boston, muy poco, muy leve, muy tarde, muy poco convincente.
[3] Incluido el nombramiento de Susana Carlotto sin tener calificación alguna en un puesto que no hay razón en este mundo por el cual debería existir.
[4] La lista es más extensa. Hoy se está paseando Marangoni por la TV. Marangoni, un secuaz de Scioli. Un tipo que debería estar preso bajo siete llaves y todo embargado. Pero no. Está protegido por Vidal.
[5] Las represas (el gran curro es que los políticos argentinos son los dueños de las tierras que el estado debe confiscar). No hay forma de que ese negociado pudiera continuar. Sin embargo el presidente presionó lo indecible al personal de línea de Parques Nacionales para que emita un dictamen a favor de la construcción de represas, lo que el personal no hizo. El presidente tuvo que colocar a dos badulaques al frente de PN, quienes son los que firmaron el informe autorizante.
[6] ¿Cuántas horas dedicó el presidente a la condonación de la deuda de SOCMA por el Correo Argentino y a pagarle la contrademanda de SOCMA al Estado? Esas horas del presidente, del procurador del Tesoro, del ministro en la materia, son costosísimas para todos nosotros.
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