PITUFO ROJO
Sí sabemos que todos están en la nómina de la agenda 2030.
Autor: Juan Martín Perkins
El intendente Zurro disfrazado de mazorquero, es más o menos como un homosexual reivindicando al Che Guevara o a yihadistas talibanes. Igualmente, en lo simbólico, hay una línea de coherencia donde siempre reinó la mentira y la hipocresía.
Salvando las distancias y sin descontextualizar, Rosas los habría hecho fusilar por la agenda perversa que impulsan.
Que feo usar el día de la tradición para hacer un acto político como si fuera Halloween.
¿Sabrá el alcalde que el “restaurador de las leyes de la Santa Federación” gobernaba bajo el terror, pero en el nombre de Dios y con la venia del pleno de la Iglesia?
El mazorquero municipal debe saber que "La Mazorca” era el brazo armado parapolicial de la “Sociedad Popular Restauradora” que se encargaba de garantizar la lealtad al régimen de terror que encarnaba el gobernador de Buenos Aires, don Juan Manuel de Rosas.
Hoy, el Brigadier General es don Axel Kicillof… y reivindicando a Rosas succiona el palito de revolver como si fuera una pajita.
Nuestro Pitufo rojo local se disfraza (de lo que aborrece) porque todo esfuerzo vale por la causa, aunque haya que marcar el paso y hacer saludo uno bajo los acordes de “Avenida de Las Camelias” y se caigan las placas del monumento a los desaparecidos.
Debe saber el Pitufo de bonete rojo y divisa punzó que el régimen de terror fue legitimado y sostenido por la alta burguesía comerciante y la mayoría del sector terrateniente, origen de las familias tradicionales que él tanto dice odiar.
Todo parece muy incoherente en apariencia, pero no tanto en realidad… Es sabido que los políticos declaman aborrecerlo, pero ni bien cobran 2 coimas adquieren campo en La Pampa.
Atento a la simbología, hay que reconocer que la divisa punzó representa la intimidación, la opresión y la violencia sanguinaria a la que se sometió a la sociedad. De hecho, fue obligatoria al igual que el grito: “¡Viva la Santa Federación, mueran los salvajes unitarios!”.
En 1830 como hoy, la grieta tenía de base una gran mentira porque Rosas fue Unitario por convicción, pero se decía Federal por conveniencia para no perder las rentas de la Aduana Central.
Hoy pasa lo mismo, nunca sabremos la convicción real del mazorquero de nuestro pago hernandiano, ni quienes conforman su sociedad popular restauradora, pero sí sabemos que todos están en la nómina de la agenda 2030.
Puede disfrazarse de gaucho mazorquero, pero come de la mano de Soros y la Open Society, como todo globalista entregado a una agenda perversa que puede resumirse en dos párrafos del libro “Cometierra” que Sileoni mete en las escuelas del feudo Kicillof con el verso de que no es pornografía sino literatura.
Los intereses de los políticos mazorqueros de todas las épocas nos han mantenido al borde de la guerra civil en una grieta que ellos mismos incentivan.
Desde Unitarios y Federales hasta la grieta furiosa de hoy que nos traen enojados y recelosos engañándonos con espejitos de colores para robarnos con más facilidad.
A toda Mazorca le llega su Caseros, ellos saben que hay un cambio de época.
Viendo el vaso medio lleno, el alcalde se disfrazó con uniforme mazorquero y la buena noticia es que por lo menos no mancilló las pilchas gauchas con sus payasadas.
Juan Martín Perkins.
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