EL COSTO DEL GAS

 


Algunos, además, tampoco son inocentes.

Autor: Germán Masserdotti [1] (@GermanMasser)


Escribo como argentino de a pie no especialista en los temas.

Me enfoco en el capítulo "energía" del que el gasoducto NK (hasta ahora, al menos, el no-gasoducto) es el último episodio.

Aquí, como en otros temas, ni las administraciones de turno ni los privados son ingenuos ni desinteresados. Algunos, además, tampoco son inocentes. Lo triste es que el argentino de a pie, consumidor/necesitado de bienes y servicios, es el pato de la boda. Ante la posible quita de subsidios y aumento tarifario, ¿debería dejar de consumir, razonablemente, el gas? Un sueldo promedio, hoy, no resiste aumentos en simultáneo. Hipótesis: sube el transporte público. Para que no afecte al bolsillo, ¿por qué no quitan el IVA que uno paga cuando compra alimentos? No soy economista pero, aunque no parezca, el dinero que el Estado no pondría en los subsidios al transporte bien podría no cobrarlo en el IVA.

Es más complejo, por cierto, pero la variable "política/política económica" es responsabilidad del estado, y en la variable "formación de precios", los privados tienen un gran cuota -no exclusiva, es cierto-, de responsabilidad.

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Referencia:

[1] Profesor universitario (Universidad del Salvador, Argentina). Magister en Estudios Humanísticos y Sociales (Universitat Abat Oliba CEU, España).


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