Centenario Infame

1930-2030, el Centenario Infame


Autor: #Bajenelgastopublico @hpititiminisky

Situación Fiscal

Comenzando 2018, la situación fiscal es muy preocupante:

- Presión impositiva récord (alrededor de 90 impuestos se llevan la mitad del precio de todos los bienes, servicios y salarios de la economía).

- Déficit récord (7% del PIB) y endeudamiento acelerado: alrededor de usd 50 mil millones anuales entre nación, provincia y municipios. Los intereses de la deuda se espiralizan y crecen más que cualquier ahorro de gasto público que se haga, conclusión: el déficit financiero sigue subiendo.


 - Atraso cambiario: cualquier producto electrónico o textil cuesta el doble que en cualquier país vecino. La inflación está entre las 10 más elevadas del planeta y el dólar no acompaña por culpa del ingreso de dólares para financiar el déficit.

En esta situación, tengo un déjà vu con 1998, hay tiempo para hacer las cosas bien, pero también por experiencia sé que nuestra clase política es especialista en desperdiciar el tiempo (llevamos 70 años).

Todo ingreso de dólares alimenta la fuga de capitales porque el dólar es lo único barato en Argentina.

Por experiencia, sé que la situación mundial puede cambiar de un momento al otro, una crisis acá (Brasil si vuelve Lula?) u otra allá (crisis por exceso de deuda en China o Estados Unidos?), y el crédito internacional cortarse, como sucedió varias veces en nuestra historia reciente.


Mientras tanto, el gobierno de Macri habla de bajar el gasto público y los impuestos, por un lado, y, por el otro, Horacio Rodríguez Larreta malgasta y sube impuestos de manera desbocada, y eso se repite en cada repartición estatal manejada por Cambiemos o la oposición.

Los medios anestesiados, por pauta, mientras tanto, no alertan a la población de la gravedad de la herencia recibida. Se limitan a luchar por la continuidad de la pauta, mientras el rating continúa en descenso y ganan peso ciudadanos independientes en las redes sociales.

¿Qué esperar hacia adelante?

Bajo crecimiento, baja creación de empleo privado (aumento del desempleo), más inflación y atraso cambiario, más demanda de populismo, más kirchnerización de Cambiemos. 

¿Una probable crisis de la deuda hacia futuro con una maxi-devaluación dentro de 3/7 años?

Combo que me lleva a imaginar un futuro en el cual hasta la soja pierda competitividad y sufra lo que le pasó a otras economías regionales, como la manzana y la pera, que de líderes mundiales nuestros productores pasaron a llorar subsidios y pedir cierre de importaciones de frutas de Chile o Corea del Sur.

¿Qué nos impide seguir cayendo? 

Al mismo tiempo, las poblaciones de muchos países han elegido ponerse a trabajar en serio, sin esperar milagros, y lo están haciendo bien. La clase media mundial es cada vez mayor y viajar cada vez es más barato (desde mi visión, las Low Cost son sólo el inicio).

Sabiendo que de una crisis de la deuda se puede tardar alrededor de 10 años en salir, que la productividad del trabajador medio argentino es baja, por su bajo nivel educativo y por la escasez de capital en estas tierras.


A partir de 2030, la única salida de los argentinos podría ser, luego de una probable maxi-devaluación ocurrida tras nuestra próxima crisis de la deuda, dedicarnos a ser el destino turístico exótico de millones de turistas de todo el mundo.

Un revival del 2002, pero con mucha más precariedad, mucha más informalidad y un mundo con muchos más turistas curiosos por viajar cada vez más a destinos más raros y lejanos.

Sitio donde fue acuchullado un turista, en La Boca,
Ciudad de Buenos Aires.

Una última llamada de atención: lo único que podría poner en peligro esta posibilidad concreta de desarrollo en torno al turismo, es la violencia de los criminales apañados por el Zaffaronismo gobernante.

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