ANDRÉS
Autor: Juan Martín Perkins
Ayer pasé por la YPF de la Mitre y compré dos baldes de 20 litros de aceite.
Cuando me pidieron 20.000 $ casi caigo de espaldas.
Subí a la camioneta y le comenté a uno de los muchachos que trabaja conmigo el impacto que me había causado el precio del aceite. Los dos viajamos un rato en silencio hasta que Andrés preguntó:
- Juan, si tuviera la oportunidad de irse del país… ¿se iría?
No sé por qué me demoré en contestar pensando la respuesta, ya que estoy muy seguro de que nunca abandonaría mi país.
Andrés agregó antes de mi respuesta… - "Esto no se aguanta más, si no cambiamos a esta gente y sus ideas cuanto antes, se hará demasiado tarde y será imposible remontar la miseria”
Intenté levantar el ánimo de Andrés. Le conté que yo había tenido el privilegio de viajar y que, desde lejos, uno tiene otra perspectiva para valorar el gran país que tenemos.
Se ve que no fui muy convincente. Él insistió con que la única salida que queda es Ezeiza porque acá se trabaja sólo para vivir. “Trabajás y trabajás como un condenado y quizás te alcance para vivir más o menos… ¿pero que me queda? ¿Cuándo llego a hacerme la casa o comprarme un auto? ¿Qué educación reciben mis hijas? ¿Qué servicio de salud puedo ofrecerles si tenemos un problema?”
“¡No da para más! Esta gente pudrió el sistema, lo quebró, de hecho, no conviene trabajar dentro de un sistema que erradicó el mérito. Acá es más rentable sentarse a esperar la asistencia que trabajar”.
“Nos hicieron miserables”, dice Andrés…
Jodida la situación, cuando se supone que, siendo el empleador, tengo que tener buenos argumentos motivadores para levantarle el ánimo y darle esperanza.
No tuve mucho éxito, la política y las palabras no son mi fuerte y el impacto que me había causado las 20 lucas del aceite YPF (gestionada por La Cámpora) no me permitían pensar con claridad.
No le mentí a Andrés. Le dije que tenía 2 noticias para darle. La buena es que Argentina tiene un gran poder de recuperación para salir rápido de sus crisis… pero la mala es que estamos en la más profunda y grave de nuestra historia, padeciendo la gestión del más horrible gobierno desde 1816. Más horrible que el 2001 del que se vayan todos en que no se fue ninguno, porque esta vez, la salud emocional no es producto solo de la crisis económica. Esta vez, es también moral... y tiene el agravante del terror gestionado por el poder con la herramienta de la plandemia.
Los dos, Andrés y yo, tenemos claro que va a ser muy difícil para todos, pero no imposible… y la vamos a pelear juntos.
Lo primero, es sacar a esta gente tóxica que nos envenena el alma. Después vemos, porque ¡ojo!, hay mucha otra gente que se dice opositora, pero tiene las mismas ideas y la misma agenda 2030 tan alejada de la gente sencilla, de la familia y de nuestro ser nacional.
Argentina está dolida, triste y empobrecida, pero su principal recurso humano solo necesita que dejen de robarle, pudrirle la cabeza y nos permitan trabajar en paz.
Tenemos todo para arrancar, solo hay que decidirse y hacerlo.
El 14 de noviembre demos otro paso.
Juan Martín Perkins.