DE ESTEBAN ECHEVERRÍA A AVENIDA DEL LIBERTADOR

Sobre el derrotero de los órganos y tejidos
transplantados en Argentina.

El 82,3% de los órganos y tejidos transplantados provienen de hospitales públicos.
Quienes los reciben se atienden mayormente en el sector privado, 78,7% del total.

Autora: Iris Speroni (@SperoniIris)


Argentina invierte desde hace décadas en la práctica del transplante de órganos. Se han formado numerosos profesionales en una actividad que requiere conocimientos y destreza. Sólo los mejores acceden a ella. 


En el 2018 se modificó la ley entonces vigente, Nº 24.193, la cual databa de abril de 1993. Con la nueva ley, la 27.447, ya no es necesario el consentimiento de la persona para que sus órganos sean extraídos (ablación) y sean implantados en otra persona. 


Éste, considero, fue un cambio ideológico profundo. 


Ya no es uno el que dispone, por su voluntad, qué hacer con el propio cuerpo, sino que es el estado, subordinado a un sistema, que a su vez sirve vaya uno a saber a qué o quién, el que lo hace. El estado, el sistema, por encima de los deseos del individuo. Es un liberalismo medio raro el nuestro. "Mi cuerpo, mi decisión", pero solamente si el estado no dispone lo contrario.


El estado, como ya lo dije respecto al cobro de impuestos y el destino de los mismos, es sólo una herramienta. Las decisiones las toman las personas y los grupos de presión que manejan sus resortes.


La nota que escribí oportunamente sobre la Ley Justina (Nº 27.447) para La Prensa; la pueden leer aquí. En ese momento sostuve:


“Si los pobres de nuestra Patria llegan a saber que son los únicos dadores de órganos, que la mayoría de los mismos no van a otros pobres sino a los ricos y los acomodados de Argentina y además se enteran que son exportables, nadie conseguirá un órgano nunca más. Los políticos no tienen idea cuánto están tensando la cuerda de la violencia civil”.


Hoy pienso igual.




Presupuesto


El INCUCAI, Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante, fue asignado un presupuesto de $ 4.315.871.340 [1] para el año 2023, en curso [2]. 



Las ablaciones del 2022


Ahora voy a poner algunas de las cifras que provee el estado nacional. Si quieren consultar y hacer sus propias búsquedas pueden ir a https://cresi.incucai.gov.ar/Inicio.do y corroborar los números o buscar otros.


En el año 2022 hubo 769 trasplantes, esto es, personas de las cuales se obtuvieron uno o varios órganos y/o tejidos. El 17,7% de las ablaciones se efectuaron en establecimientos privados (clínicas) y el resto, 82,3% en establecimientos públicos (nacionales, provinciales, municipales, de OOSS de empleados públicos, de hospitales de las FFAA y FFSS y universitarios). De esas 769 personas se obtuvieron 1734 órganos y tejidos.





¿Cuáles son los orígenes más importantes en orden de magnitud?


Listado completo al pie [3].


Las palmas se las lleva el municipio de Esteban Echeverría, Provincia de Buenos Aires, con su Hospital del Bicentenario Dr. Luis Federico Leloir, con 59 personas de las cuales se les extrajeron 104 órganos y tejidos.


En segundo lugar está el Hospital Dr. Ángel Cruz Padilla de Tucumán, con 32 personas de las cuales se extrajeron 60 órganos y tejidos. 


En tercer lugar el Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez de Santa Fe, con 31 personas de las cuales se extrajeron 47 órganos y tejidos. 


En cuarto lugar, y esto es muy curioso, se encuentra un establecimiento de la provincia de Corrientes, el Hospital Escuela General San Martín, con 25 personas de las cuales se extrajeron 61 órganos y tejidos. El caso de Corrientes llama la atención porque es una provincia con poca población. Es la de mayor incidencia en relación con la cantidad de personas intervenidas respecto a la población. Dicho en criollo, tiene la mayor cantidad de extracciones por habitante de todo el país. Y es una particularidad que se repite en diversos años.


Uno tiene que llegar al lugar vigésimo tercero para encontrar un establecimiento privado del cual las personas en coma sean sujetas a la extracción de órganos. Es el caso del Hospital Italiano de la Ciudad de Buenos Aires, con 7 personas de las cuales se extrajeron 22 órganos y tejidos. Al pie está el listado completo y el vínculo al sistema del INCUCAI.


Otra característica es que las personas de las cuales se extraen los órganos son muy jóvenes (entre 20 y 29 años). Si bien el informe da las causas de la muerte, son muy genéricas [4]. Por información extraoficial, gran parte son accidentes de auto, moto o peatones atropellados.


Uso la expresión “persona de la que se extraen órganos” en lugar de “donante” porque a partir de la ley Justina, Nº 27.447, ya no hace falta que la persona consienta la donación del órgano. Ya no es más un dador o donante (“quien dona”) sino alguien a quien el estado le extrae los órganos y tejidos con o sin su consentimiento previo.


La nacionalidad de las personas es en su mayoría argentinos. 94,8% de los casos. El 5% restante está compuesto por 11 paraguayos, 10 bolivianos, 7 uruguayos, 4 peruanos, 3 chilenos, 2 españoles, 1 brasileño y 1 chino.




La otra punta del proceso


Vamos ahora a mirar quiénes reciben los órganos y tejidos. Los números son mayores porque de una sola persona se extraen varios órganos y tejidos, los cuales a su vez pueden ser implantados en varias personas. En total, se implantaron 8457 órganos y tejidos. Así hubo 769 de las cuales se extrajeron órganos y tejidos, pero hubo 2078 receptores de córneas. En el caso de “Sistema osteo articular”, los receptores fueron 4542. Si sumamos todos los tipos de órganos o tejidos, llegamos a 8457. El cuadro en detalle al pie [5].


¿Dónde se colocan los órganos y tejidos que se quitan en Esteban Echeverría o en Tucumán o en el hospital de emergencias de Santa Fe? No en Esteban Echeverría o Florencia Varela o La Matanza.


Por lo pronto, el procedimiento de recepción e implantación se realiza en el 78,7% de los casos en clínicas privadas y solamente en el 21,3% en establecimientos públicos.




Puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que la mayoría de los receptores están en mejor situación económica que la de aquellos a los que se le han extraído órganos y tejidos.


Listado de clínicas, hospitales e instituciones donde se efectúan las implantaciones. Entre los diez primeros, en cantidad de ablaciones, hay tres instituciones públicas (H. Garrahan, Central de Mendoza y El Cruce) y siete privadas:


  1. Círculo Odontológico de Rosario, con 505,

  2. Hospital Italiano de Capital Federal, con 393,

  3. Hospital de Pediatría Dr. Juan Garrahan (público), con 391,

  4. Hospital Universitario Austral, con 297,

  5. Nephrology, Capital Federal, con 216,

  6. Fundación Favaloro, Capital Federal, 196,

  7. Sanatorio Allende, Córdoba, 167,

  8. Hospital Central (público), Mendoza, 159,

  9. Consultorio Odontológico Dr. Oscar Ranalli, Capital Federal, 159

  10. Hospital el Cruce, Provincia de Buenos Aires (público), con 149.


Nephrology es una clínica que se encuentra en la calle Austria al 2012, capital federal, entre Juncal y French.


La nacionalidad de los receptores es argentina en el 96,4%  de los casos; equivalente a la proporción de ablaciones. Luego hay 65 bolivianos, 55 paraguayos, 35 uruguayos, 22 españoles, 20 chilenos, 20 venezolanos, 16 italianos, 16 peruanos, “neutral” 13, 11 norteamericanos, 5 rusos, 4 brasileños, 4 portugueses, 3 colombianos, 3 ecuatorianos, 2 suizos, 1 indio, 1 canadiense, 1 coreano del sur, 1 francés, 1 chino, 1 coreano del norte y 1 senegalés.


En el caso de países limítrofes, las relaciones entre receptores y ablaciones es proporcional. Respecto a españoles e italianos como receptores, podría tratarse de personas mayores que formaron parte de la ola inmigratoria de postguerra - más si se tiene en cuenta la edad promedio de los receptores excluídos los casos pediátricos -. Lo mismo se puede decir de senegaleses, coreanos, chinos y rusos como pertenecientes a las últimas oleadas de inmigración en la Argentina. Lo que no se explica es el caso de 11 norteamericanos, 2 suizos, 1 indio y 1 canadiense. Tal vez las autoridades del INCUCAI deberían explicarnos si hay turismo de trasplantes en la Argentina o si hay un convenio de canje con otros países y en ese caso en que condiciones se ha firmado.




La financiación es en gran parte privada (de OOSS y prepagas) como se aprecia en el cuadro. Para ver detalle con el nombre de cada institución, puede ver la hoja de cálculo en el vínculo aquí.



Conclusiones


El tema de trasplante de órganos es un tema que trato de evitar. 


Claramente la propaganda de la actividad consta de una niña en una casilla de algún conurbano la cual recibió un hígado. En primer lugar: esos casos son ciertos, como consta en las estadísticas. Hay transplantes que se realizan en los hospitales Garrahan y El Cruce. Pero como hemos comprobado, es una minoría.


Gran parte de quienes se benefician son no muy pobres - no me atrevo a decir ricos, porque los ricos en Argentina son muy pocos y se tratan en Suiza o EEUU -. Es indudable que los transplantes permiten sobrevida y, más loable aún, mejor calidad de vida. Quienes han sido beneficiarios no sólo cambiaron su realidad para mejor sino la de sus familias. 


Es una práctica que exige un marco ético. 


No puede convertirse en un método de prolongar la vida a personas que por el sólo hecho de ser ricos no acepten la edad y el devenir natural, que es la muerte. 


Tal vez, deberían ponerse algunas reglas adicionales. Limitar a los receptores, en edad y nacionalidad. Nadie le negaría el servicio a un inmigrante. Pero sí a un turista. Y una persona muy mayor…en algún momento uno debe aceptar que somos mortales. Si tienen dudas, escuchen el Himno Nacional: “¡Oíd, mortales!”. Los mortales somos nosotros.


No pongo en discusión miles de casos de niños y personas jóvenes que tienen toda su vida por delante. Pero nosotros, los viejos…no sé. 


La segunda pregunta debería ser: ¿Por qué tan poca gente pobre - la mayoría del país, según las estadísticas en las cuales yo no creo - accede a este servicio? ¿Dónde está la barrera para que no puedan acceder? ¿Cómo, al igual que La Farolera, esta barrera podría levantarse?


De corazón espero no tratar este tema nunca más.


"Hoy comamos y bebamos,..., que mañana ayunaremos". Sabias palabras.


* * *

Otro sí digo:
Como es un tema muy sensible,  si cometí algún error, por favor, corríjanme. Haré los cambios pertinentes.

* * *

Notas:

[1]

Equivalente a 23.551.821,7 de dólares, si los convertimos al dólar Banco Nación del 30 de diciembre de 2022: $ 183,2500/U$D.


[2]

El número lo pueden ver en el PresupuestO Nacional, Planilla Nº 1A, Anexa al Título III.


[3]

El detalle por establecimiento lo pueden ver aquí https://docs.google.com/spreadsheets/d/1VV7IFO10G_R8iFiIsjM1gmPAUMpxOk7jNZJa78ewXfc/edit?usp=sharing o en el sitio de estadísticas del INCUCAI.

[4]

Planilla de causas de muerte 2022.

[5]
Establecimientos donde se realizan los transplantes, 2022, los primeros 20 en orden de magnitud.

Listado completo aquí.


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Agradecemos la difusión del presente artículo:  

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