INFLACIÓN


Tenemos un estado solventado casi exclusivamente por los más humildes.



Hace años que sufrimos alta inflación. Una vez más.

La inflación es una desgracia para toda la economía, pero en particular para quienes viven de ingresos fijos: salarios, jubilaciones, pensiones. En resumen, toda la sociedad paga la inflación pero nadie tanto como los pobres.


Sucede lo mismo con el impuesto al valor agregado (IVA) y el impuesto a los combustibles: cae sobre las espaldas de todos, pero en particular sobre los más humildes, que cuando van al almacén pagan 50% de productos (comida, limpieza, tocador) y 50% de impuestos.


Tenemos un estado solventado casi exclusivamente por los pobres. Por eso el sueldo promedio de la economía es de U$D 230 (dólar paralelo), ó U$D 300 (dólar oficial). Son valores equivalentes a los del 2002/2003 [POBREZA FRANCISCANA]. 


Los políticos podrán decir que les preocupa el hambre. Lo cierto es construyeron un estado gigante e inútil sostenido por las espaldas de los asalariados y de quienes viven de changas.


* * *


¿Qué dijo nuestro presidente Alberto Fernández sobre la inflación en su discurso del 1º de marzo de 2021 frente a la Asamblea Legislativa?


La inflación es la principal evidencia de nuestras deficiencias.

La inflación es un problema multicausal. Debemos abordarlo de modo integral, con políticas macroeconómicas consistentes y sostenibles. Y con diálogo social que permita estructurar acuerdos de mayor alcance.

Durante 2020 pudimos reducir en 18 puntos la inflación que heredamos en 2019.

Fue un primer paso para revertir la tendencia ascendente que se había registrado en 2018 y 2019”.


 Dijo muchas cosas. La primera es que la inflación es un síntoma de “nuestras deficiencias”. No es así. La inflación es una decisión del gobierno. No es “algo que les pasa” a los gobiernos. Es la voluntad de los mismos tener inflación. Es un objetivo de política económica.


Luego el presidente afirma que es un problema multicausal. Me permito discrepar. La inflación no es multicausal. Tiene una única causa: la emisión monetaria. No soy la única que piensa así. Los convencionales constituyentes de 1994 lo entendieron de igual manera. Sobre esto volveremos en un rato.


¿De dónde sale eso de “multicausal”? Existen innumerables “papers” (ensayos o miniensayos) de economistas explicando las mil y una razones de la inflación excepto la emisión monetaria. La mayoría de estos escritos fueron redactados por quienes terminaron en el gabinete económico o en el BCRA de Raúl Alfonsín, quien quedará en la historia como el Padre de la Híperinflación. 


¿Por qué sobrevive esa “ideología”? Porque exculpa a los responsables de la inflación. Son teorías que divierten la atención de la verdad. Entonces el responsable de la inflación no es el Presidente del BCRA, el Presidente de la Cámara de Diputados, el Presidente de la Cámara de Senadores (los firmantes de los billetes), quienes emiten como maniáticos descontrolados, sino el almacenero, el fabricante de aceite o zapatillas, el dueño de una estación de servicio; en resumen, cualquiera excepto estas personas. Como la “teoría” es útil, aunque falsa, sobrevive.


¿Por qué emiten los gobiernos? En cualquier lugar del mundo, para solventar gastos. En Argentina, existen razones adicionales.


Tiene razón el presidente en que la inflación durante la administración anterior fue muy alta. Este año, probablemente, presentará guarismos similares al 50% anual, si no más.


La inflación del gobierno de Macri es por la misma razón que durante el actual régimen: darle dinero a los bancos. Es monocausal. Ambos gobiernos le dieron fortunas a manos llenas con el consiguiente artilugio: emiten bonos del BCRA (llamadas letras) para “contener” el dólar. La “contención del dólar” es el mayor verso de las últimas décadas y que ha hecho millonaria a varios. El mecanismo lo expliqué en LA OTRA IFE.


¿Cómo funciona? 


El gobierno saca dinero del mercado, dinero que previamente emitió. El BCRA emite letras (bonos) o lo que es lo mismo, toma dinero de los bancos a cambio de papeles (letras). Esto hace que el dinero emitido no circule en el mercado y por lo tanto no presione ni la inflación ni el tipo de cambio. Este mecanismo se llama en la jerga “esterilizar la emisión”, esto es: el gobierno emite pero no permite que ese dinero circule entre las personas entonces es “como si no hubiera emitido”. Pero sí emitió. El gobierno le remunera esos bonos/letras/papeles a los bancos con intereses. Se denomina déficit cuasifiscal. El BCRA le paga intereses a los bancos con nueva emisión, por lo que agranda el problema. 


Ahora bien, es un problema de creación del propio gobierno, que es el que emite en primer lugar, y lo soluciona emitiendo aún más, lo que sólo agranda el descalabro, para beneficio de los bancos. Es una serpiente que se muerde la cola. 





Es un problema ficticio, ya que fue inventado por el propio gobierno. Si no hubiera emitido de más, no tendría que “esterilizar”, ni darle dinero a los bancos. En realidad es un andamiaje totalmente inventado con el fin de sacarle recursos al gobierno (y a la sociedad) para dárselo a la banca. Se soluciona en un día, en realidad en 7 días. Se pagan las letras a su vencimiento y no se emite más. Con eso sólo se para la rueda de emisión. Solución que, ¡oh!, nadie propone.


Durante el 2020 la banca se llevó $ 1.220.000.000.000 en concepto de intereses, tanto del BCRA (las letras descriptas) como de bonos del Tesoro. A un dólar de 100 $, la banca se llevó U$D 12.200.000.000 en un año, gran parte financiado con inflación, esto es, con el bolsillo de los más pobres. Es un monto equivalente a toda la recaudación de IVA no aduanera 2020 ó equivalente a más de tres veces la recaudación de derechos de exportación. 


Nadie se beneficia más del “estado presente” que nuestra banca. Y no es de ahora, es desde hace mucho. La emisión monetaria en Argentina es un minué que bailan los bancos con el BCRA, el cual reporta (inconstitucionalmente) en forma  directa al presidente de la Nación.

Agrego lo que digo siempre: si los gobernantes tienen cuentas pendientes con los bancos (porque pusieron plata en la campaña, porque los ayudaron a llegar, por lo que sea), sale más barato que les den el dinero directamente (como a otros proveedores del estado), por ejemplo en concepto de honorarios o servicios de asesoría, y no mediante la manipulación del tipo de interés que rompe toda la economía, porque no sólo el estado paga 80% ó 40% ó 33% anual, sino que todas las personas y empresas ven sus costos financieros subir a la par, en su saldo de tarjeta de crédito (personas) o en el descuento de cheques (industria y comercio). El daño es gigantesco y todo por un poder de lobby que nadie se atreve a enfrentar.




Constitución 1994


Los convencionales constituyentes entendieron lo obvio: que la inflación no es multicausal sino monocausal y la produce el BCRA. Por eso puso en cabeza del Congreso controlarla. También puso sobre sus hombros el nivel del tipo de cambio. Y es razonable: la inflación afecta a todos pero más que a nadie a los humildes. Los defensores constitucionales del Pueblo son (deberían ser) los diputados. Por eso todo billete tiene la firma del Presidente de la Cámara de Diputados.


De igual forma el tipo de cambio bajo empobrece a las provincias porque:

tipo de cambio bajo = unitarismo

tipo de cambio alto = federalismo

Por lo que quienes deben decidir el nivel del tipo de cambio deberían ser los representantes de las provincias, esto es, los senadores.

Como se verá la Constitución puso la responsabilidad donde corresponde y no es en cabeza del presidente de la Nación.


Constitución Nacional

Artículo 75.- Corresponde al Congreso:

...

4. Contraer empréstitos sobre el crédito de la Nación...

...

6. Establecer y reglamentar un banco federal con facultad de emitir moneda, ...

...

11. Hacer sellar moneda, fijar su valor y el de las extranjeras; y adoptar un sistema uniforme de pesos y medidas para toda la Nación.

...

19. Proveer lo conducente a...la defensa del valor de la moneda....



Sin embargo ni diputados ni senadores cumplen con sus obligaciones y delegan tácitamente en el presidente de la Nación la política monetaria (inflación, art. 75 inc. 19) y la política cambiaria (art. 75 inc. 11). 


Los convencionales constituyentes (la actual vicepresidente de la Nación fue la vicepresidente de la Convención) consideraron que la inflación era monocausal y que dependía únicamente de la conducta del BCRA (a las órdenes del Congreso). ¿Por qué el Congreso no asume su responsabilidad?


Parte, por cobardía. Es más fácil cobrar el sueldo y dejarle el problema a otro. Pero otra parte es por desconocimiento: no sé cuántos legisladores tienen en claro que son ellos y sólo ellos los responsables del bolsillo de la población.


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Referencias: 
Discurso del Presidente Alberto Fernández ante la Asamblea Legislativa el 1º de marzo de 2021

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Lecturas Relacionadas:

POBREZA FRANCISCANA

LA OTRA IFE

EL TAMAÑO DEL BOTÍN

http://restaurarg.blogspot.com/2021/02/el-tamano-del-botin.html 


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