RUTA DE LA MUERTE

Alevoso como la casta se protege sin pudor en estos días.

Autor: Juan Martín Perkins  


No entiendo nada de política, casi siempre me equivoco en mis pronósticos y me sorprendo con las actitudes de la burocracia que hace que la realidad siempre supere a la ficción.


Una constante ha sido que muchas personas que ingresaron a la política despotricando contra ella y prometiendo cambiarla desde adentro, al cabo de un tiempo, se borocotizan y terminaron fagocitados por la máquina infernal de la burocracia..


Esta vez fue el gran lema de campaña, La sociedad demandó ir contra “la casta” y un hombre común levantó la bandera y marchó contra la casta del estado que oprime a los ciudadanos.


El público lo hizo presidente, pero antes le llenó las cámaras de Senadores y Diputados con la lacra de impedir.


Hoy la lucha es encarnizada. Para evitar el shock, la casta se volvió súbitamente republicana, respetuosa de las instituciones y democrática para disimular todos sus hábitos golpistas.


Y todo vale.


En todos los estamentos del estado hay agentes del impedimento defendiendo los intereses particulares de la burocracia. El ciudadano es lo que menos les importa.


Un ejemplo son las rutas. Desde que el pueblo tuvo la osadía de cambiar y votó a Milei, nunca más se cortó el pasto de las banquinas a más de 60 km de CABA.


¿Votaron a Milei? Jódanse, circulen por un túnel de cardos, rama negra, sorgo de Alepo, Juncos, Quinoa. Y si pincha una rueda, vaya en llanta o cámbiela perdido entre los yuyos.


Pregunté en un peaje como podía ser que interrumpieran el servicio poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos… la respuesta fue que Vialidad no le paga a las empresas que desmalezan porque está en plena pulseada con Milei.


Una chica muy amable en Areco, autopista ruta 8, me sugirió que asentara la queja para colaborar con la solución y evitar que tomen de rehenes a los ciudadanos.


El libro de quejas no estaba disponible, te lo dije, nosotros somos lo que menos importamos.

Sin exagerar, las malezas impiden la visualización de carteles, señales de tránsito, ojos de gato en curvas, mojones de kilometraje, alcantarillas… es como circular entre paredes de un metro y medio de altura.


Eso sí, llenaron de cámaras para detectar infracciones con absoluta intención recaudatoria y los peajes no dejan de cobrarse.


¿La cúpula de la casta burócrata de Vialidad Nacional y provincial se va a hacer cargo de los costos de nuestra incomodidad y de los accidentes que se pudieran ocasionar por esta extorsión? Deberían responder con su patrimonio personal.


Te dicen que la política es el arte de lo posible y la más maravillosa herramienta para cambiar la realidad de las personas. Mentira, la única realidad que cambian es la de ellos, la nuestra no les importa… y cuando llega un presidente que los incomoda, nos usan para hacerle la vida imposible y echarlo.


Alevoso como la casta se protege sin pudor en estos días y siempre que se trate de actualizar presupuestos y cajas de donde se proveen para el financiamiento de su fiesta, para eso siempre hay acuerdo y los votos aparecen. Con discursos encendidos por la patria y el pueblo, pero aparecen los votos para meter impuestos, tasas… y autorizar endeudamientos que pagaremos nosotros, nuestros hijos y nuestros nietos…


Para ellos es fácil porque es con culo ajeno.


Juan Martín Perkins.

* * *


 


Agradecemos la difusión del presente artículo:  


* * *

Entradas populares

Traducir