DESALMADOS Y ENVENENADORES
Mientras tanto, el mal avanza con prisa y sin pausa instalándonos a nosotros como malos, desalmados, violentos y envenenadores.
Autor: Juan Martín Perkins
Soy de los que creen que todo lo que se ha legislado después de la gloriosa Constitución Nacional de 1853 no ha hecho más que malograr a nuestro país.
Se han encargado de destruir el espíritu liberal alberdiano aparentando debatir en nombre de alguna nobleza, pero sumando una letra chica que sume en la esclavitud.
La mayoría de las veces no hemos reaccionado a tiempo porque las propuestas nos parecen tan alocadamente ridículas, que nos hemos confiado en que caerían por su propia imbecilidad.
Pues no cayeron, ni caen, ni caerán a pesar de ser cada vez más perversas.
Yo voté a Milei por disruptivo y porque hizo la promesa de derogar el aborto.
Creo que habría que derogar TODO lo que legislaron desde 1853 a la fecha.
Con la constitución original, si la cumpliéramos, alcanza y sobra para ser un gran país. Hay que cumplirla, no reformarla a criterio de los intereses particulares de unos pocos ladrones.
Las ordenanzas y las leyes son producidas por gente no calificada para tal fin que se jacta de su trabajo según cuantos proyectos de aberración contra la sociedad hayan presentado.
La discusión que lograron instalar para estos días es “la ley Conan”. Como si no estuviéramos ocupados en pelear la situación adversa de crisis, además, ahora nos tiran al ruedo para que nos matemos por los “Sintientes”.
Lo lamento por el presidente y por nosotros, se suicida y nos mata a todos.
Abren una puerta a la caja de pandora que lo deja desnudo. Contradicen absolutamente el espíritu de su discurso en Davos y lo muestran como un total incoherente.
Abren la puerta a litigar contra la producción de todas las carnes, huevos y leche porque en el texto original no se hace diferencia entre animal doméstico y de producción…
Van contra los que se rompen el lomo trabajando… todo para tranquilizar los caprichos de la organización “Sintiente” que redactó el proyecto.
¿Otro tiro en los pies?
Vienen por la yerra, la jineteada, las carreras de caballos, los galgueros, los feed lots, los tambos, la tracción a sangre, el trabajo de a caballo ¿en que van a desfilar los granaderos?
Si lo que digo te parece una exageración, pensá en todas las aberraciones que antes confiaste en que no se votarían y hoy son leyes contrarias a nuestros intereses argentinos.
Todo lo que se legisla apunta a condicionar la propiedad, a restarnos patria potestad, soberanía decisional sobre nuestra familia…
Toda ley genera dudas interpretativas y ambigüedades. La ley Conan avanzará sobre la producción al igual que las ordenanzas sobre las restricciones de uso para fitosanitarios.
Tengamos en cuenta que estamos en un país donde se impone que la percepción sea más importante que la realidad, no importan las evidencias ni el rigor científico.
El animalismo va a intentar prohibir la ganadería, criar gallinas, cazar, pescar, jugar al polo, al pato, las jineteadas, paleteadas, carreras… mientras los productores agropecuarios discuten si es muy fuerte poner la palabra “comunismo” en un comunicado.
El De Ángeli del 2008 al que le faltaba un diente decía desde un carro en el piquete de Gualeguaychú: “Cocodrilo que se duerme es cartera”.
Hoy, Alfredo está domesticado por la política y nosotros los productores, embobados por los ojos claros Liz Solari y nuestra propia modorra culpógena y cómoda.
Mientras tanto, el mal avanza con prisa y sin pausa instalándonos como malos, desalmados, violentos y envenenadores.
¿Les parece exagerado lo que digo? A mí no.
Juan Martín Perkins
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