BODRIO
Autor: Juan Martín Perkins
Los títulos dicen que el parlamento tratará cientos de proyectos en “Maratónica sesión”.
La última sesión del año ha merecido el título de “Maratónica” haciendo referencia a que será la ultima sesión ordinaria del año. ¿Mediados de noviembre y ya se guardan?
En diputados, durante todo 2019, hubo record de baja actividad legislativa, típico de año electoral con presidenciales. Se han distraído en lo que mas les gusta, la campaña eterna.
No voy a contar detalles sobre la bajísima actividad de ambas cámaras porque lo que importa no es la cantidad sino la calidad de la legislación. Por lo tanto, lejos de enojarnos por la manera en que se rascan el higo dilapidando nuestros impuestos, lo que nos tiene que importar son los desastres que votan en el poco rato que se sientan en la banca.
Para legislar como legislan, le harían un gran servicio a la Nación si se quedaran en la pileta del club y no dieran quórum nunca.
Ficha Limpia no pudo ser, a pesar de las 315.000 firmas de “Change.org”, pero la ley de alquileres por ejemplo, o la incumplible ley de góndolas, salieron casi por ¡unanimidad!!. Salieron como sale todo lo que representa un avance del estado sobre la propiedad privada y las relaciones entre particulares.
Cuando vi la imagen del presidente de diputados llorando, tuve la ilusión de que había tomado conciencia del bodrio y pedía perdón en nombre de todo el cuerpo.
Insisto, lo que importa es la calidad no la cantidad. La mayoría de las veces es mas importante y patriótico impedir, que facilitar.
Las mejores leyes para la argentina de hoy deberían empezar su redacción con la palabra deróguese…
Sobran leyes que nadie cumple, cuando con solo respetar la constitución alcanza y sobra. Allí está todo para convivir en paz. Es para llorar que hagan una ley de folklore “obligatorio” o cupos femeninos en festivales.
Escuchaba la frustración de Marra por perder estado parlamentario con Ficha Limpia y pensé lo difícil que debe ser tratar de hacer algo dentro del bodrio. Es remar en dulce de leche.
Lo que me pregunto es, ¿cómo se puede pretender parar la corrupción con una ley?… en un país donde nadie respeta la ley y cada 4 años los volvemos a votar y llenamos el gobierno de ladrones. ¿Una ley los va a parar? ¡¡Si los premiamos con los votos!!!
Un bodrio es una cosa mal hecha, desordenada y de mal gusto según la R.A.E. La definición nos calza como un guante.
“Caldo con algunas sobras de sopa, mendrugos, verduras y legumbres que, de ordinario, se daba a los pobres en las puertas de algunos conventos” es otra definición de bodrio de la Real Academia.
Díganme si esta semana no fuimos un verdadero BODRIO.
Un secretario de salud que no renunció cuando le degradaron el ministerio a secretaría ni cuando le estalló la primera epidemia de sarampión en 20 años, pero si por un protocolo inconsulto que era una legalización del aborto maquillada. Un senador tucumano, ex gobernador acusado de violar a su sobrina. Prostitución vip en el Turismo Carretera, denuncias de coima cruzada Riquelme-Angelici.
Es verdad, hay que optar, no se puede estar informado y conservar la alegría de vivir.
Suerte que esta semana nos rescató un poco el Coco Basile poniendo en su lugar a Tinelli. Fue un soplo de aire fresco que me sacó del bodrio.
¿No se da cuenta la corpo política del agobio al que nos somete? Y después nos sorprendemos de los colapsos de Bolivia, Chile etc.
Nos llevan a la exasperación y nos dejan servidos en bandeja.
Ahora llega un nuevo gobierno. Está abocado a buscar su fuente de financiamiento para la continuidad del relato keynesiano inviable. ¿Qué creen que hará? ¿Tomar conciencia de la inviabilidad? ¿Ajustarse y gestionar la crisis o pedirnos un gran esfuerzo adicional en nombre del hambre y la pobreza?
Se que tienes la respuesta, espero que tengas claro lo que depende de nosotros, los ciudadanos de a pie.
La ley primera del bodrio es: como nos ve, nos trata. Y nos ve mal.
Juan Martín Perkins.
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