MOGADISHU

Mogadishu.
Cómo sobrevivir en una anarquía soft.


Bueno, amigos, nos toca vivir en un país en pleno proceso de anarquización. Hay cosas peores en la vida, pero tampoco se puede decir que es ideal. Vivir se vive, y la verdad que no tan mal. Sin embargo, no está de más tener en cuenta algunas cosas que pueden hacer de este interregno, con algo de suerte, poco más que una simple molestia.

 Nuestra derecha, equivocada como siempre, vende humo diciendo que vivimos en una especie de dictadura comunista-masónica-satanista del Nuevo Orden Mundial. Como vi por ahí, 1984 es Harry Potter para neocons — y no se puede esperar demasiado de gente que despotrica en contra del socialismo a la vez que admira a George Orwell, cuyo problema con Stalin era que no estaba haciendo “verdadero socialismo”.

 Y como nuestra derecha es la peor derecha concebible, vive en su propio parque de diversiones mental en el que sale a marchar para sacarse selfies y luego llorar fascismo en Twitter — y hace poco y nada por dar buenos consejos a la gente que de buena fe se le acerca en busca de respuestas.

 Para la derecha argentina urge levantarse en contra de la tiranía — por Dios, por la Patria y por San Martín, por la propiedad privada o por vaya uno a saber qué le pasa por la cabeza a esa criatura bizarra que es el votante promedio de NOS.

 Pero gracias a Dios estoy yo. Hoy les voy a dar unos tips para que puedan salir ilesos o al menos vivos de nuestro lento pero firme e inevitable descenso a Mogadishu. Por lo menos ténganlos en cuenta — después si quieren seguir escuchando a El Presto es problema de ustedes. You can lead a horse to water etc. etc.
  1. Entiendan que la Constitución y la constitución son cosas separadas. El poder nominal rara vez coincide con el poder de facto: que algo haya sido escrito no lo vuelve más ni menos real.
  2. A su vez, respeten la ley en todo momento o siempre que sea posible. Que la ley no les guste no significa que deban desobedecerla. Sumar al caos no ayuda a nadie más que a aquellos que con el caos se benefician. Destruir el poco orden que queda es muy, muy tonto.
  3. Cuídense de los delincuentes como si dependiera únicamente de ustedes, porque en muchos casos será así. No tomen riesgos innecesarios creyendo que porque pagan los impuestos el Estado tiene que protegerlos. Tener razón nunca paró ninguna bala.
  4. Sin embargo, valoren la ayuda de las fuerzas de seguridad cuando llega. Respeten a la policía y no hagan su trabajo más difícil. A un gobierno que no gobierna se le anima cualquiera; los verdaderos valientes se ven en China.
  5. Siempre estén lo más preparados que puedan para cualquier catástrofe.
  6. Si hay una pandemia, usen barbijo, salgan sólo cuando es necesario y por una vez en la vida no piensen que George Soros quiere controlarles la mente.
  7. Si no quieren contribuir a la anarquía, no participen de maniobras de desestabilización en contra del gobierno. No se van a hacer un favor a ustedes mismos ni a sus familias. Al contrario — van a trabajar gratis para una banda de pillos.
  8. Durante la pandemia no obstruyan el trabajo del gobierno. El gobierno es malo y débil, y no cooperar empeora las cosas. El virus no distingue entre gente pro-cuarentena y anti-cuarentena.
  9. Tengan claro que ustedes no gobernarían mejor. Tampoco su candidato favorito. Si algo no le hace falta a nuestro país es que lo gobierne una banda de delirantes.
  10. Como en el caso de la inseguridad, sepan que en lo que respecta al coronavirus cuidarse depende enteramente de ustedes mismos. Sean inteligentes.
  11. Si el país no les gusta, váyanse en silencio o trabajen para cambiarlo cambiando ustedes, también en silencio. En todo caso, hagan lo que hagan, no sumen al quilombo.
  12. Entiendan que Dios no les está pidiendo que derroquen al gobierno. Si escuchan voces vayan al médico.
  13. Aléjense de personas que emplean términos como “NOM”, “coronaverso”, “plandemia”, “infectadura”, o les pasen links de Youtube con “la verdad acerca del coronavirus”. Probablemente sean desquiciados que lamen picaportes para llevarle la contra al gobierno y se contagien tarde o temprano. Nuevamente, cuídense.
  14. Salgan de todos los “grupos” de derecha que no estén exclusivamente interesados en la teoría política. Si no tienen un ejército, ni se gasten en hacer nada. La vida es corta como para pasársela conspirando al pedo. Usen el tiempo para leer y ser mejores personas.
  15. Por último, vivan su vida y sean felices. Llamen por teléfono a sus abuelas, que se van a poner muy contentas. Yo perdí a las mías de muy chico.

Hasta aquí los reaxiotips, queridos amigos. Estos son los tiempos que nos tocan vivir. Podrían ser mejores, pero tampoco podemos quejarnos demasiado. Para nosotros los reaccionarios es tiempo de esperar, pero para entretenernos tenemos archive.org y fútbol en HD. No se puede pedir mucho más.

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