PERITO MERCANTIL

mayo 08, 2021

PERITO MERCANTIL

Seamos osados.

Autora: Iris Speroni (gab: https://gab.com/Iris_Speroni)

Pretendí hacer una nota sobre educación secundaria, modalidad perito mercantil, pero la información es, por un lado escasa, y por el otro sobreabundante y caótica, por lo que éste será, necesariamente, un trabajo en proceso.

Como nota al margen, debo remarcar la falta de atención que las autoridades educativas de la provincia de Buenos Aires le prestan a la educación agropecuaria (a diferencia de las autoridades nacionales en 1975). En la provincia hay muchos establecimientos educativos, tanto primarios como secundarios, en gran parte privados. Sin embargo, los trabajos, estadísticas y consideraciones de las autoridades es casi nula. A pesar de la que la provincia de Buenos Aires es la mayor productora de la Nación y la más importante en exportaciones de productos agrícolas y agroindustriales. Esto sucede cuando las autoridades de la provincia son porteños que obtienen una changa en la provincia (y reniegan cada vez que tienen que ir a La Plata), señoras “pedagogas” de Palermo Sensible o Barrio Norte, o que en su defecto desearían serlo, sin conocimiento de la provincia ni curiosidad por aprender. Con esta gente, tenemos los actuales resultados. Refuerza mi sospecha de que la provincia está intervenida, al menos en el SXXI. Es hora de que los bonaerenses se autogobiernen y echen a los interventores. Pero basta de esto.

Perito Mercantil

Según el informe del Ministerio de Trabajo correspondientes a la situación de febrero 2020 (aquí), de los 11.982.200 trabajadores registrados, 1.099.600 son empleados de comercio, 155.500 se desempeñan en la intermediación financiera (bancos, financieras, casas de bolsa), 851.000 en el sector inmobiliario y empresarial (?). Entre estos tres rubros sumamos 2.106.100 personas. El 17,5% del total. Hay más, pero lo veremos después.

Mi pregunta es: ¿por qué no se enseña más perito mercantil como orientación secundaria en la Argentina, dado que tiene una importante demanda laboral? Es más, las facultades de ciencias económicas y las de computación tienen una cantidad de inscriptos importante, signo de que los estudiantes creen que podrán conseguir trabajo cuando terminen los estudios. Entonces, no se entiende por qué el sistema educativo argentino no refuerza esta oferta a nivel secundario.

Los pedagogos y funcionarios de los ministerios de educación tienen varias obsesiones, que demuestran en cada informe que emiten. Hablan de lo que a ellos les interesa. ¿Qué les interesa? Cuánta gente estudia en cada nivel (primario, secundario y terciario), si van a colegios privados o públicos, cuántos niños y adolescentes repiten de año y en el caso de la provincia de Buenos Aires, qué comida le dan a los educandos, si merienda, almuerzo, desayuno, etc. En algunos informes nacionales (uno muy bueno emitido durante el gobierno de Macri), cuántos niños y adolescentes abandonan la escuela. Con resultados desoladores.

¿Por qué la mitad de los adolescentes argentinos no terminan el secundario? En primer lugar, porque es muy caro. Vestir y darle de comer a un adolescente, es costoso. Además está el costo de los útiles escolares. El otro costo - no menor - es el de oportunidad: ¿cuánto podría ganar el adolescente si entra de peón en algún taller o ayuda al padre en la obra o sale a cartonear? La familia solventa este costo si ve algún rédito al final del túnel. El estudiante debe ver un futuro en lo que hace. El presente es desagradable: aulas sucias, indisciplina que se traduce en violencia interna dentro del edificio, profesores que faltan, profesores que van y no enseñan, profesores que no toman examen ni corrigen. Los alumnos comprueban que no aprenden saberes. Creo que la causa es que la mayor oferta del sistema es el bachiller, que por definición es un paso previo a la facultad y no un fin en sí mismo. La fórmula para el fracaso.

Según las nuevas autoridades de PBA el objetivo del secundario es (Página 10, [*]):

En consecuencia, la Educación Secundaria de seis años de duración tiene como propósitos:

• ofrecer situaciones y experiencias que permitan a los alumnos y las alumnas la adquisición de saberes para continuar sus estudios;

• fortalecer la formación de ciudadanos y ciudadanas;

• vincular la escuela y el mundo del trabajo a través de una inclusión crítica y transformadora de los alumnos/as en el ámbito productivo.

Léase: 1) escalón previo a la facultad equivalente a pérdida de tiempo para cientos de miles de adolescentes; 2) bajar línea política, 3) este punto lo explican un par de páginas más adelante: enseñar a los chicos sobre los abusos en el mundo laboral (“crítica”) y prepararlos para resistir el sistema. Estoy de acuerdo en que se les enseñe sus derechos y que aprendan a que nadie pueda abusar de ellos. Pero si no tienen herramientas laborales, nadie va a querer contratarlos. Eso no es un tema importante para nuestros pedagogos, aparentemente.

Pedagogos y funcionarios de la provincia de Buenos Aires analizan los contenidos que desean impartir, los cuales están bien; pero hablan más de danzas y de cultura cívica, que de preparar a las personas para que se ganen el sustento. Diseños curriculares (léase “contenidos”) según la PBA [**].

Trataré de ser clara: está perfecto que aprendan todo eso. Pero con eso sólo no se come. De educación comercial, nada.

La oferta de educación comercial es baja en todo el país, cuando es una parte importante de la demanda laboral. Porque además de los tres rubros que listé, que suman el 17,5% del total, todos sabemos que toda fábrica necesita al menos un empleado administrativo. En el caso de establecimientos pequeños que contratan estos servicios a terceros, tenemos como contrapartida monotributistas o profesionales que los proporcionan y a su vez necesitan auxiliares que bien podrían ser peritos mercantiles. Así que el número de trabajos que requieren estos saberes supera estos números. Por otro lado, según el informe citado, existen 3.225.400 empleados públicos. Estas personas incluyen todas las profesiones (policías, FFAA, otras FFSS, personal de salud, FFMM, docentes, personal de maestranza, recolectores de basura, personal de cementerios, vialidad, etc.). Pero una parte del personal público tiene tareas administrativas. Quienes recaudan impuestos, quienes liquidan los sueldos de sus compañeros, cualquiera sea esta tarea, el control de inventarios y recepción de compras, mesas de entrada, etc., gran parte del personal de AFIP, ANSES, PAMI o ministerios lleva adelante tareas administrativas. Por otro lado tanto en comercio como en entidades financieras, parte del personal está constituido por profesionales en Ciencias Económicas, que habría que restarlo de la demanda de peritos mercantiles (ya que tienen estudios superiores). Sin embargo, por otro lado, los estudios comerciales son buenos preparatorios para ingresar a una facultad de Cs. Econ.

Entonces, ¿por qué se eliminaron los peritos mercantiles? ¿Por qué no es una preocupación relevante en las autoridades cuando puede ser una gran salida laboral para millones de personas?

Misterio.

Capital Federal

Me voy a concentrar en el gobierno de la Ciudad, porque si bien es quien mejor resolvió el tema (ha inventado ofertas interesantes), es quien mejores estadísticas tiene. Provincia de Buenos Aires no llega ni a los talones de lo que se hace en la capital.

En la Ciudad sólo ha quedado un secundario mercantil en la comuna 2. Todos los otros desaparecieron. Un punto a favor, mantienen una gran cantidad de “comerciales nocturnos” para adultos. Bien ahí. Si bien eliminaron los peritos mercantiles, crearon los secundarios con especialidad, las cuales son diversas. Dentro de ellas hay “Economía y Administración”, “Informática” y “Turismo”. No es lo mismo, pero es una opción interesantes para muchos.

Contenido del Bachillerato orientado a Economía y Administración, Resol Nº 321/2015 (aquí), Ciudad de Buenos Aires.

Les muestro el plan nacional para peritos mercantiles nacional 1975 (aquí, página 32) para que comparen. Si tienen curiosidad vean los contenidos del bachiller agrario 1975.

Verán que el de 1975 es más completo. Tenían derecho comercial, administrativo e impositivo y conocimientos prácticos como caligrafía y mecanografía, que ahorra tiempo para todo aquél que deba trabajar con un teclado, en particular los que se dedican a la computación.

¿Cuántos chicos estudian comercial o administración en la capital? Las cifras del Anuario Estadístico no están desagregadas por especialidad, por lo que no sabemos cuántos estudian artes visuales y cuántos economía y administración, pero las cifras son éstas: 2.201 comercial y "orientados" de todo tipo 83.720 .

Como dato interesante: 39.000 personas adultas estudian el secundario en la capital. El informe no dice cuántos de ellos van al bachiller comercial que la ciudad mantiene (Resolución 853/74). Ojalá sean muchos.

Respecto a la educación de adultos, miles de personas hacen el hercúleo esfuerzo de terminar sus estudios primarios y secundarios, en particular en las provincias más pobres del país. Valga mi humilde homenaje para todos ellos, hombres y mujeres valientes. Chapeau!

En cuanto a provincia de Buenos Aires, es muy difícil conseguir estadísticas que sirvan. Acá hay un informe del año 2019 que no especifica las modalidades de estudio. y otro de 2017 . Sí presentan otros datos que les pueden interesar.

Conclusiones

La educación secundaria como está hoy planteada es un callejón sin salida. Por eso el alto índice de deserciones. Las autoridades sólo atinan a promocionar los chicos para no "expulsarlos" en lugar de buscar las causas de la fuga. Y no las buscan porque los pedagogos y las autoridades deberían mirarse en el espejo y mirar a las familias y no quieren hacer ni una cosa ni la otra.

Es claro que el título de "perito mercantil" tiene demanda laboral en la Argentina. Más de un 20% del total. Entonces no es mala idea reinstalarlo. Otra propuesta debería ser ampliar la cantidad de escuelas agrarias y las industriales. Pero son caras. Para el gobierno y para las familias. En Capital el estado paga todos los útiles de los industriales (imposibles para la mayoría de las familias) lo que hace que mantengan la matrícula. Pero no todos los distritos hacen lo mismo.

La otra solución es un primer ciclo de dos o tres años donde les den la base general del secundario (matemática, lengua, geografía, historia, química y física, biología) y les enseñen oficios, todo junto. En dos o tres años sale un maestro pintor (de paredes), colocador de vidrio o durlok, albañil, carpintero, panadero, pizzero, jardinero, quesero, heladero, talabartero, tapicero, mecánico, plomero, electricista, gasista. Lo que sea. Esos muchachos deberían cobrar un pequeño viático. Con eso nos aseguramos que tengan salida laboral y estudios que con dos años más de escuela nocturna puedan terminar el secundario (por si después quieren estudiar ingeniería). Es pensar de otra manera nuestra educación.

Seamos osados.

* * *

Nota:

Sería interesante que alguien especializado en educación agraria dijera qué deberíamos hacer para popularizar esos estudios y cómo hacerlo atractivo a los alumnos de la ciudad. Si alguien tiene material, por favor, mándelo. Gracias.

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Referencias: