ANTE EL TEMOR, LA LOCURA
¿Criticar el terrorismo es una "enfermedad mental"?
El 16 de diciembre de 2015, un periodista francés en una estación de radio mayoritaria comparó al Partido Nacional del ala derecha de Francia con el Frente Islámico (ISIS) al decir que hay una "comunidad espiritual" entre ellos y que ambos presionan a quienes los apoyan a "retirarse en su propia identidad". Marine Le Pen, la presidente del partido Frente Nacional, habló de una "patinada verbal inaceptable", pidió a la estación de radio el derecho a réplica. Luego publicó en Twitter imágenes que muestran los cuerpos de las víctimas del Estado Islámico y agregó: "¡Esto es ISIS !"
Los medios franceses la acusaron inmediatamente de transmitir imágenes "indecentes" y "obscenas", y poco después, el gobierno francés ordenó al Departamento de Justicia que la acusara. El 8 de noviembre de 2017, la asamblea nacional francesa levantó su inmunidad parlamentaria.
Unos meses después, un juez encomendado por el gobierno francés, acusó a Marine Le Pen de "difundir imágenes violentas", citando el artículo 227-24 del Código Penal francés, que define el delito de:
"... difundir ... un mensaje de naturaleza violenta, incitando al terrorismo, pornográfico o que pueda violar gravemente la dignidad humana o incitar a los menores a participar en juegos que los pongan en peligro físicamente, o comercialicen ese mensaje".
Como parte del procedimiento, Marine Le Pen recibió una carta de la corte que le ordenaba someterse a una evaluación psiquiátrica para determinar si estaba sana. Ella se negó , diciendo que mostrar los horrores cometidos por el Estado Islámico no es una incitación al asesinato, y que las imágenes de víctimas del terrorismo no pueden equipararse a la pornografía.
La solicitud del tribunal indica que las autoridades francesas podrían estar reviviendo el antiguo uso soviético de "psiquiatría" para silenciar a los disidentes u opositores políticos.
En este momento, Le Pen puede ser arrestada en cualquier lugar, en cualquier momento y podría enfrentar hasta cinco años de prisión.
Como candidata presidencial en mayo de 2017, recibió el 34% de los votos en la segunda ronda de votaciones. Enviarla a la cárcel podría provocar enojo entre sus partidarios, por lo que no se espera su arresto.
Lo que parece más probable es un esfuerzo por intimidarla y, si es posible, destruirla políticamente. Hace unas semanas, el gobierno francés solicitó a los magistrados responsables de investigar los "delitos financieros" que confiscaran dos millones de euros de fondos públicos otorgados al partido de Marine Le Pen, que desde entonces ha cesado casi todas las actividades públicas. La ofensiva legal contra Marine Le Pen se agregó a la ofensiva financiera. Incluso si Le Pen no es enviada a prisión, la ley parece haberse utilizado para abrir la posibilidad de declararla inelegible para las elecciones al Parlamento Europeo programadas para mayo de 2019.
El presidente francés, Emmanuel Macron, sabe que hoy en día, el partido de Le Pen es su principal oposición en Francia y que Le Pen es su principal opositor político. Se describe a sí mismo como el campeón de la visión "progresista" de Europa y el principal enemigo de aquellos que quieren resistir la islamización, la inmigración descontrolada, y que desean defender la soberanía nacional; opiniones que ha descrito como " lepra " y " vientos malignos ". ". Ha criticado verbalmente al viceprimer ministro y ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, así como al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que están creando una alianza europea de movimientos nacionalistas que incluyen al partido de Le Pen. De lo contrario,Hungría y Polonia si se niegan a aceptar más migrantes.
Macron ve que una victoria de la alianza Salvini-Orban no solo sería una humillación para él, sino que una victoria del partido de Le Pen en Francia podría significar el colapso final de su desmoronada presidencia (su índice de aprobación, que ha caído 6 puntos). el último mes, ahora se sitúa en el 23%). No puede aplastar la alianza Salvini-Orban, pero puede afectar el proceso político en Francia.
La postura de Macron contra Le Pen también podría ser un intento de su gobierno para evitar más violencia islámica en Francia. En la actualidad, los libros y publicaciones que hacen referencia a la dimensión violenta inherente en el Islam están boicoteados y ausentes en las librerías (el Corán, sin embargo, todavía está ampliamente disponible). Las organizaciones que luchan contra la islamización de Francia y Europa son hostigadas judicialmente. Pierre Cassen y Christine Tasin, los líderes del principal sitio web francés contra la islamización, Riposte Laïque ("Respuesta Laica"), deben pasar una cantidad desproporcionada de tiempo en el tribunal y recibir una fuerte multa de forma regular. Para evitar el cierre de su sitio web, han tenido que reubicar su sitio web fuera de Francia y la Unión Europea.
Un informe de 615 páginas fue publicado recientemente, escrito por un asesor de Macron, Hakim El Karoui, quien está a cargo del diseño de las nuevas instituciones de un "Islam de Francia". El informe define el islamismo como una "ideología totalmente distinta del islam" y nunca aborda los vínculos entre el islamismo y el terrorismo. El informe también insiste en la urgente necesidad de difundir el "verdadero Islam" en Francia y adoptar la enseñanza del árabe en las escuelas secundarias públicas.
En los medios de comunicación franceses, cualquier mención de los vínculos entre el Islam y la violencia se ha eliminado casi por completo. Cuando un musulmán comete un ataque con un cuchillo y grita "Allahu Akbar" ("Alá es el más grande"), el mensaje oficial publicado incluso antes de cualquier investigación declara invariablemente que lo que sucedió no tenía "nada que ver con el Islam" y " ningún carácter terrorista ". Todos los medios entonces citan ciegamente el mensaje. En el ataque más reciente de este tipo, el 9 de septiembre en París, siete personas resultaron heridas, cuatro de ellas graves.
Recientemente, el autor Éric Zemmour habló en la televisión de la alta proporción de jóvenes musulmanes entre los reclusos de Francia y del aumento del antisemitismo musulmán en los suburbios de Francia. El Conseil supérieur de l'audiovisuel (CSA), el regulador de radio y televisión de Francia, dijo a la estación que Zemmour había pronunciado "comentarios estigmatizantes sobre los musulmanes" y que la estación sufriría enormes consecuencias si alguna vez los repitiera. Un presentador de un programa de entrevistas francés comenzó a circular una petición para que Zemmour fuera totalmente excluido de los medios de comunicación franceses. La petición atrajo a más de 300,000 firmas en una semana.
Zemmour se preguntó si el gulag soviético tendría que reabrirse especialmente para él o si tendría que elegir el autoexilio. Recibió tantas amenazas de muerte creíbles que ahora está bajo la protección de la policía las 24 horas.
El politólogo Jean-Yves Camus dijo que aunque no está de acuerdo con los puntos de vista de Marine Le Pen, "en todas partes y siempre, decir que un opositor político está" loco "abre las puertas del totalitarismo".
Un abogado, Regis de Castelnau, escribió en el Causeur mensual :
"Hay un país en Europa donde el principal partido de la oposición, luego de la incautación de sus recursos financieros, solicita a su presidente que se someta a una evaluación psiquiátrica judicial. ¿Es la Rusia de Putin o la Hungría de Orban? No. Es Francia".
Castelnau agregó que la ley utilizada para acusar a Marine Le Pen se usa generalmente para acusar a "pervertidos" y "psicópatas", y que solo se solicitó "pericia psiquiátrica" porque sus sentencias criminales a menudo iban acompañadas de la obligación de recibir tratamiento psiquiátrico.
"Todos aquellos que se ríen de los problemas de sus oponentes políticos", dijo , "deberían recordar que si aceptan los ataques a las libertades políticas, pronto les llegará el turno".
Por: Guy Millière
https://www.gatestoneinstitute.org/13072/le-pen-dissent-mental-illness
Traducción: Pachira (@cuabiapellarolo y @BGSNAFU)
El 16 de diciembre de 2015, un periodista francés en una estación de radio mayoritaria comparó al Partido Nacional del ala derecha de Francia con el Frente Islámico (ISIS) al decir que hay una "comunidad espiritual" entre ellos y que ambos presionan a quienes los apoyan a "retirarse en su propia identidad". Marine Le Pen, la presidente del partido Frente Nacional, habló de una "patinada verbal inaceptable", pidió a la estación de radio el derecho a réplica. Luego publicó en Twitter imágenes que muestran los cuerpos de las víctimas del Estado Islámico y agregó: "¡Esto es ISIS !"
Los medios franceses la acusaron inmediatamente de transmitir imágenes "indecentes" y "obscenas", y poco después, el gobierno francés ordenó al Departamento de Justicia que la acusara. El 8 de noviembre de 2017, la asamblea nacional francesa levantó su inmunidad parlamentaria.
Unos meses después, un juez encomendado por el gobierno francés, acusó a Marine Le Pen de "difundir imágenes violentas", citando el artículo 227-24 del Código Penal francés, que define el delito de:
"... difundir ... un mensaje de naturaleza violenta, incitando al terrorismo, pornográfico o que pueda violar gravemente la dignidad humana o incitar a los menores a participar en juegos que los pongan en peligro físicamente, o comercialicen ese mensaje".
Como parte del procedimiento, Marine Le Pen recibió una carta de la corte que le ordenaba someterse a una evaluación psiquiátrica para determinar si estaba sana. Ella se negó , diciendo que mostrar los horrores cometidos por el Estado Islámico no es una incitación al asesinato, y que las imágenes de víctimas del terrorismo no pueden equipararse a la pornografía.
La solicitud del tribunal indica que las autoridades francesas podrían estar reviviendo el antiguo uso soviético de "psiquiatría" para silenciar a los disidentes u opositores políticos.
En este momento, Le Pen puede ser arrestada en cualquier lugar, en cualquier momento y podría enfrentar hasta cinco años de prisión.
Como candidata presidencial en mayo de 2017, recibió el 34% de los votos en la segunda ronda de votaciones. Enviarla a la cárcel podría provocar enojo entre sus partidarios, por lo que no se espera su arresto.
Lo que parece más probable es un esfuerzo por intimidarla y, si es posible, destruirla políticamente. Hace unas semanas, el gobierno francés solicitó a los magistrados responsables de investigar los "delitos financieros" que confiscaran dos millones de euros de fondos públicos otorgados al partido de Marine Le Pen, que desde entonces ha cesado casi todas las actividades públicas. La ofensiva legal contra Marine Le Pen se agregó a la ofensiva financiera. Incluso si Le Pen no es enviada a prisión, la ley parece haberse utilizado para abrir la posibilidad de declararla inelegible para las elecciones al Parlamento Europeo programadas para mayo de 2019.
El presidente francés, Emmanuel Macron, sabe que hoy en día, el partido de Le Pen es su principal oposición en Francia y que Le Pen es su principal opositor político. Se describe a sí mismo como el campeón de la visión "progresista" de Europa y el principal enemigo de aquellos que quieren resistir la islamización, la inmigración descontrolada, y que desean defender la soberanía nacional; opiniones que ha descrito como " lepra " y " vientos malignos ". ". Ha criticado verbalmente al viceprimer ministro y ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, así como al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que están creando una alianza europea de movimientos nacionalistas que incluyen al partido de Le Pen. De lo contrario,Hungría y Polonia si se niegan a aceptar más migrantes.
Macron ve que una victoria de la alianza Salvini-Orban no solo sería una humillación para él, sino que una victoria del partido de Le Pen en Francia podría significar el colapso final de su desmoronada presidencia (su índice de aprobación, que ha caído 6 puntos). el último mes, ahora se sitúa en el 23%). No puede aplastar la alianza Salvini-Orban, pero puede afectar el proceso político en Francia.
La postura de Macron contra Le Pen también podría ser un intento de su gobierno para evitar más violencia islámica en Francia. En la actualidad, los libros y publicaciones que hacen referencia a la dimensión violenta inherente en el Islam están boicoteados y ausentes en las librerías (el Corán, sin embargo, todavía está ampliamente disponible). Las organizaciones que luchan contra la islamización de Francia y Europa son hostigadas judicialmente. Pierre Cassen y Christine Tasin, los líderes del principal sitio web francés contra la islamización, Riposte Laïque ("Respuesta Laica"), deben pasar una cantidad desproporcionada de tiempo en el tribunal y recibir una fuerte multa de forma regular. Para evitar el cierre de su sitio web, han tenido que reubicar su sitio web fuera de Francia y la Unión Europea.
En los medios de comunicación franceses, cualquier mención de los vínculos entre el Islam y la violencia se ha eliminado casi por completo. Cuando un musulmán comete un ataque con un cuchillo y grita "Allahu Akbar" ("Alá es el más grande"), el mensaje oficial publicado incluso antes de cualquier investigación declara invariablemente que lo que sucedió no tenía "nada que ver con el Islam" y " ningún carácter terrorista ". Todos los medios entonces citan ciegamente el mensaje. En el ataque más reciente de este tipo, el 9 de septiembre en París, siete personas resultaron heridas, cuatro de ellas graves.
Recientemente, el autor Éric Zemmour habló en la televisión de la alta proporción de jóvenes musulmanes entre los reclusos de Francia y del aumento del antisemitismo musulmán en los suburbios de Francia. El Conseil supérieur de l'audiovisuel (CSA), el regulador de radio y televisión de Francia, dijo a la estación que Zemmour había pronunciado "comentarios estigmatizantes sobre los musulmanes" y que la estación sufriría enormes consecuencias si alguna vez los repitiera. Un presentador de un programa de entrevistas francés comenzó a circular una petición para que Zemmour fuera totalmente excluido de los medios de comunicación franceses. La petición atrajo a más de 300,000 firmas en una semana.
Zemmour se preguntó si el gulag soviético tendría que reabrirse especialmente para él o si tendría que elegir el autoexilio. Recibió tantas amenazas de muerte creíbles que ahora está bajo la protección de la policía las 24 horas.
El politólogo Jean-Yves Camus dijo que aunque no está de acuerdo con los puntos de vista de Marine Le Pen, "en todas partes y siempre, decir que un opositor político está" loco "abre las puertas del totalitarismo".
Un abogado, Regis de Castelnau, escribió en el Causeur mensual :
"Hay un país en Europa donde el principal partido de la oposición, luego de la incautación de sus recursos financieros, solicita a su presidente que se someta a una evaluación psiquiátrica judicial. ¿Es la Rusia de Putin o la Hungría de Orban? No. Es Francia".
Castelnau agregó que la ley utilizada para acusar a Marine Le Pen se usa generalmente para acusar a "pervertidos" y "psicópatas", y que solo se solicitó "pericia psiquiátrica" porque sus sentencias criminales a menudo iban acompañadas de la obligación de recibir tratamiento psiquiátrico.
"Todos aquellos que se ríen de los problemas de sus oponentes políticos", dijo , "deberían recordar que si aceptan los ataques a las libertades políticas, pronto les llegará el turno".
El Dr. Guy Millière, profesor de la Universidad de París, es autor de 27 libros sobre Francia y Europa.
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