CONTROL DE DAÑOS
Las élites de Seattle contrataron una empresa de Relaciones Públicas para hacer control de daños por la epidemia que sufren de heroína, SIDA y linyeras
Por Brock Simmons
Nota original: https://www.thegatewaypundit.com/2019/04/seattle-elites-hire-pr-firm-for-damage-control-on-homeless-heroin-now-hiv-epidemics/
Traducción: Hyspasia
En lugar de usar su riqueza para resolver los problemas que plagan a Seattle, las élites locales se han unido para contratar una empresa de relaciones pública para que difundan información errónea en un esfuerzo de minimizar la decadencia de lo que alguna vez fue una gran ciudad. Esta gente incluye a Bill Gates y Steve Ballmer, cuya riqueza combinada excede los cien mil millones de dólares. Un trazo de lapicera sobre un cheque puede o bien resolver el problema que enfrenta Seattle o bien pueden patear a la lata para que ruede por la calle y mirar como la ciudad se deteriora aún más.
Christopher Rufo fue candidato a intendente de Seattle. Ahora es un periodista de investigación en el City Journal. Se retiro de la contienda electoral el año pasado luego de haber recibido amenazas para él y su familia por ser el único no-comunista que se presentaba para el cargo.
Su más reciente artículo descubre el camino de transacciones y revela la campaña de relaciones públicas que fue bocetada por Pyramid Communications, llamada "Seattle para Todos" y muestra cómo engañan a la ciudadanía:
"Desde que se emitió el documental de Eric Johnson "Seattle is Dying" ("Seattle está muriendo"), el cual describe una epidemia de gente viviendo en la calle, adicciones, crimen y desorden, las élites de la ciudad han lanzado una campaña coordinada de información (o desinformación) que tiene por destino a los votantes frustrados con la respuesta de la ciudad a los "sin techo". Al principio de este mes, se filtraron documentos que revelaron que un grupo de fundaciones - Bill & Melinda Gates Fountation, Campion Advocacy Fun, Raikes Foundation, Ballmer Group - contrataron a la empresa de relaciones públicas Pyramid Communicationes, para conducir encuestas, mandar mensajes, diseminar los resultados a través de una red de socios - no públicos - en las universidades, la prensa, el gobierno y el sector sin fines de lucro. La campaña #SeattleForAll, es un caso de estudio, el cual el escritor James Lindsay llama "lavado de ideas" (por lavado de dinero) - crear información falsa y legitimizarla como verdad objetiva por repetición en los medios de comunicación adscriptos.
Los mensajes clave de la campaña incluyen un número de aseveraciones engañosas que incluyen: "Seattle está haciendo progresos para terminar con el problema de la gente en situación de calle", "1 de cada 4 personas que viven en situación de calle en nuestra comunidad lucha contra el abuso de drogas y alcohol" y "[el 62 por ciento de los votantes de Seattle creen] que no se está gastando lo suficiente para enfrentar el problema de la gente en situación de calle". Las tres afirmaciones fallan si se les hace un escrutinio básico: la gente en la calle aumentó un 131% en los últimos cinco años; la demanda del Condado King contra Purdue Pharma admite que "la mayoría de las personas en situación de calle es adicta o usuaria de opioides" (no 1 en 4); y que el 62% de los votantes de Seattle están de acuerdo con la frase "no estamos gastando lo suficiente" sólo si es antecedida por la frase "otras ciudades del mismo tamaño están gastando 2 ó 3 veces el monto que Seattle gasta y esas ciudades comprueban significantes reducciones de la población sin techo" lo que de por sí es una expresión sin substancia. (Cuando la misma pregunta se presenta neutralmente, sin marco, el apoyo a "no estamos gastando lo suficiente" baja al 7%.
Aún así los medios de comunicación han esparcido y repetido las gacetillas de prensa de Pyramid. "Nuevos sondeos muestran que la mayoría de Seattle sostiene que tenemos una obligación moral de ayudar a los sin techo y que necesitamos gastar más" declaró el periodista del Seattle Times, Gene Balk. Catherine Hinrichsen, directora del proyecto de La Familia Sin Techo de la Universidad de Seattle, publicó en la revista local Crosscut "6 razones por las cuales la apreciación KOMO sobre el problema de los Sin Techo es errónea" (KOMO es el canal ABC que emitió "Seattle is Dying"). Hinrichsen argumenta que el documental "asocia vivir en la calle con el uso de drogas, las enfermedades mentales y el crimen". Y la intendente de Seattle, Jenny Durkan, le dijo a los reporteros que "hemos hecho grandes avances" y desechó el documental como "sólo una opinión". Su oficina promocionó el mensaje #SeattleForAll desde los canales oficiales del gobierno municipal.
Muchos de los autores y medios de comunicación que publicaron el mensaje de #SeattleForAll evitaron hacer público que su trabajo había sido financiado por el mismo grupo de fundaciones que había contratado a Pyramid Communications y que su contenido había sido distribuido directamente por Pyramid y por la Ciudad de Seattle (N. de T.: gacetillas de prensa). Por ejemplo, en la historia que publicó, Hinrichsen evita mencionar que la Fundación Bill & Melinda Gates es la única financista de su Proyecto La Familia Sin Techo; su editor, Crosscut, no revela que las fundaciones de Gates y Raikes son los mayores financistas de sus notas sobre la gente en situación de calle.
La trabajos tras bambalinas de la campaña #SeattleForAll cuentan una historia muy clara: un grupo de adinerados filántropos contrataron a una empresa de relaciones públicas para producir contenidos engañosos, encuestas falsas y las distribuyeron en los principales diarios de la ciudad y en otros medios de comunicación (muchos de los cuales reciben generosas donaciones de esos mismos filántropos), y que encubrieron el hecho de que la campaña era parte de una campaña mayor coordinada con el gobierno de la ciudad. La "contranarrativa" al documental "Seattle is Dying" no fue una reacción espontánea de un grupo diverso de expertos. Fue un esfuerzo planificado por los filántropos de Seattle, sus académicos, los medios de comunicación, y las élites gubernamentales para bajar la presión de sus críticos. Los poderes institucionales de Seattle, en otras palabras, atentaron pisar el emergente consenso público de que el tratamiento de la ciudad al problema de los Sin Techo es erróneo.
La campaña #SeattleForAll está destinada a fallar. Cuanto más se intente acallar las opiniones, más contraproducente puede ser. Seattle is Dying habla de la bronca de cientos de miles de residentes cuyas voces no son escuchadas. Los líderes de la ciudad serían prudentes en dejar descansar a sus ejecutivos de relaciones públicas y escuchar un poco. Los residentes de Seattle piden un cambio.
Seattle se Muere.
En una reciente aparición en el show de Janson Rantz, Rufo lo explica en gran detalle.
Lisa Carr hace una crónica de su reciente viaje a Seattle, y lo que dice no es muy lindo.
"Por cada Tesla, veo una carpa en la calle. Por cada carpa, un Tesla pasa zumbando. Hubiera sido un juego de borrachos, si no fuera porque yo estaba detrás del volante de mi auto. Caminé por las calles de Seattle en las tardes. Gente en las calles, gente gesticulaba y murmuraba a amigos imaginarios. Adictos sentados en las esquinas, fijados en Dios sabe qué. Y también hay gente como usted o yo (¿realmente son como usted o yo?). Caminan a su lado con los teléfonos celulares enfrente de sus caras mirando a cualquier lado menos a la horrorífica escena que se despliega frente a ellos. Están o bien haciéndose los distraídos o apáticos. He visto más reacción de parte de los Seatlinos cuando mi auto pasaba cerca de una bocacalle al hacer un giro que cuando un linyera cruza. Las miradas pasivas-agresivas de parte de los residentes de la Ciudad Emerald son sorprendentes. Les digo, pensé por un momento que se iban a despertar y mirar qué estaba sucediendo alrededor de ellos.
La ausencia, creo, es por la apatía y porque hay gente que honestamente cree que no puede hacer algo para mejorar las circunstancias de ellos o de la gente que vive en las calles. Aquellos que han intentado aplicar la ley y el orden han visto sus manos atadas y no pueden cumplir sus obligaciones. El Consejo de la Ciudad no escucha o no le importa.
Una de las tardes huí de la ciudad y conduje hasta Pioneer Square que es a la vez sucio y peligroso. Yesler Way cerca de la autopista luce como si hubiera sido vomitado de basura, carpas y ranchos. Seattle no es más la ciudad donde los hipsters creativos acudían en bandadas en los 90. Y sí, si usted fue a Seattle durante su época grunge, usted es un hipster. Acepte la realdiad. Esta Seattle está sorda. Pareciera que algunos de sus residentes y sus políticos están más preocupados por reciclar la basura en carajésimas formas diferentes que en levantar las jeringas. Sus iglesias están más ocupadas en exhibir sus banderas de LGBTQ y transgénero al lado de sus puertas que en darle de comer a los hambrientos y tratar de sacar de esas pesadillas a esas personas verdaderamente marginadas, en esos residentes dejados por la mano de Dios. Siento que las guitarras de Mudhoney o the Melvins no pueden despertar a estos zombies de su sueño. Miren, ahí pasa otro Tesla".
Para agregar virus a la adicción, ahora hubo un nuevo brote de SIDA en los campamentos de los Sin Techo.
"Los funcionarios de Salud identificaron un brote de SIDA entre los Sin Techo del Norte de Seattle.
Entre Enero y Noviembre del 2018, 27 mujeres y hombres heterosexuales del Condado de King fueron diagnosticados con SIDA por inyectarse drogas con jeringas contaminadas. Incrementa en un 286% la cantidad de casos respecto al 2017, de acuerdo al Centro de Control y Prevención de la Morbidad y Mortalidad, publicado en su reporte semanal.
Los funcionarios de Salud Pública de Seattle y del Condado de King identificaron 14 casos relacionados entre sí, y que se encontraban viviendo en un radio de un kilómetro. De esos casos nueve mujeres han dicho que han tenido sexo por dinero y 12 de ellas han admitido inyectarse drogas.
Los científicos que han hechos análisis moleculares (N. de T. : biología molecular) han determinado que esas personas han sido infectadas por la misma cepa y que forma parte del mismo cluster. De todas formas los funcionarios advierten que que tengan la misma cepa no quiere decir que haya una conexión epidemiológica en cada caso.
Desde que el brote fue identificado, el departamento de Salud alertó de la emergencia para que se aumentara el seguimiento de los Sin Techo que se inyectan drogas y que incrementen las muestras en North Seattle, la distribución de condones y los servicios de entrega y retiro de jeringas. La cárcel del Condado de King también aumentó los testeos de SIDA entre sus internos.
El brote del 2018 forma parte de un patrón de crecimiento del SIDA aún más grande, diagnosticado entre usuarios de drogas. Las nuevas infecciones de SIDA entre mujeres y varones heterosexuales por uso de drogas se triplicó el último año.
No esperen que la situación mejore por ahora. Los "socialistas democráticos de América" están activamente reclutando candidatos para manejar el Consejo deliberante de Seattle, reemplazando a tres-miembros-del consejo-deliberante-sin-género-especificado que han anunciado que no se postularan para ser reelectos. Sí, es así, Seattle no es lo suficientemente de izquierda y busca ser más de izquierda aún.
No van a parar hasta que todos y cada uno de los negocios quiebren, que todos los edificios estén desocupados, que cada ruta y calle esté libre de autos, que toda el área sea un campamento de adictos a las drogas. Aún entonces encontrarán la manera de echarle la cupla a Trump, al capitalismo, a la Asociación del Rifle, a la gente blanca, a los aborígenes sasquatch, a Kurt Cobain.
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