CUERVOS

 


Se ve que hay efectivo y está tan claro y evidente que nadie cree en nada.


Autor: Juan Martín Perkins  



Leo al Cuervo Larroque recomendando poner las barbas en remojo porque lo que le está pasando al compañero Alberto hoy, mañana le puede pasar a cualquiera.


Lo del Cuervo, es un sincericidio esclarecedor y auto incriminatorio hacia el kirchnerismo, hubiera sido bueno que tuviera este rapto de honestidad durante la pandemia. 


Que fea semana para ser K, también condenaron al vende humo de Guillermo Moreno.


Hasta el más fanático kirchnerista sabe con que bueyes araba… y  cada uno se queda en el molde, porque tiene a su “pobre Fabiola Yáñez” personal en el placard.


Así y todo, inmersos en la mar de la hipocresía, hace 20 años que nos dirigen con la moralina del relato donde TODO ES UNA GROTESCA MENTIRA.


Sin entrar en detalles, hay que decir que el cínico-psicópata de Fernández es un icono del kirchnerismo. Por él y su jefa nos dejamos robar, engañar, estafar, asustar, encerrar, psicopatear, amenazar e inyectar un experimento que no era vacuna. 


Nos dejamos violar por un farsante “feminista” que garroteaba a una mujer embarazada y por una banda de mitómanos como los compañeros Espinoza, Alperovich, Insaurralde, Brieger, Guazzora, etc., etc., un consorcio criminal que se cansó de faltarnos el respeto.


Así de fácil, como quién despacha a un fiscal molesto, sin pestañear.


Hace años que tenemos “señales evidentes” como para que la justicia despierte.


Desde el rumor de Néstor maltratando a Cristina (siempre víctima esha), Máximo defendiendo a su madre, y el velorio a cajón cerrado, todo está bajo un manto de sospecha en la Narnia de #NiUnaMenos.


Como si no importara, porque éste es el relato nacional y popular… 


La política de DDHH, a la cual otro ex presidente llamó “Kurro”; las nuevas universidades; la construcción de casas por “Sueños Compartidos del choreo” Schoklender y Bonafini; la asistencia social en manos de ladrones; la obra pública organizada como sistema de sakeo; las operaciones desde los medios de comunicación con pauta oficial; es todo misma matriz.


Sobre actuaron la sorpresa cuando descubrimos que Victoria Donda, jefa del INADI (QEPD) negreaba a su mucama y le ofrecía un cargo en el estado para no pagarle indemnización.

Es todo la misma matriz embustera e hipócrita que se nos ha hecho carne natural.


Natural como la psicopateada de la pandemia, donde los argentinos le dieron mandato ilimitado y el 80% de popularidad a un consorcio criminal.


Los periodistas llora pauta que hoy sobreactúan sorpresa e indignación por las zurras a Fabiola Yáñez, son los mismos que limaban a Macri y nos vendían al “Alberto moderado”.


Nunca la ven mientras la agenda avanza y nos obligan a hablar y obrar como tarados, pero inclusivos, desde la corrección política woke más extrema.


No la ven, pero impusieron el aborto con el aval del compañero Bergoglio, que nunca la ve.

Sobreactuaron sorpresa e indignación con las fiestas clandestinas en Olivos, pero no dijeron nada sobre el avance arrollador de la ideología de género y todos los puntos de la agenda 2030. Se ve que hay efectivo y está tan claro y evidente que nadie cree en nada.


Pero todo tiene un límite, el poder se extingue y la verdad emerge.


Hoy dicen que Alberto Fernández amenazó con quitarse la vida… a nadie sorprendería que lo “nismearan”, porque nos han acostumbrado a que cualquier grotesco puede ocurrir.


Todos sabían quién es Alberto Fernández y están hasta las manos. Sobre todo la jefa, que cuando las papas queman, se hace la sota y manda a tejer un nuevo relato.


Saben que pueden hacer cualquier cosa y que nosotros pagaremos las consecuencias.


No les importa, pero repito, la verdad emerge y la justicia llega. Tarde, pero seguro, llega.


Teléfono para el alcalde que no será la excepción, porque fue y es miembro del consorcio.


Todos lo sabemos.



Juan Martín Perkins. 


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