JAMES DELINGPOLE: CAER EN EL HORROROSO HOYO

 


Allí, salvo por la gracia de Dios, vamos todos



James Delingpole



En Restaurar hemos reproducido notas de James Delingpole en numerosas oportunidades. Es un viejo conocido. Sabemos cómo piensa. Aún así, nos sorprendió. Delingpole se plantea dudas más que razonables. ¿Hubo niñas asesinadas en Southport o es todo ficticio? ¿Trump sufrió un atentado o es un montaje? Cuando uno empieza a mirar todo con otros lentes, la realidad, como uno la conocía, cambia. Si consideramos que el Sr. Delingpole fue uno de los primeros en decir que lo del Cambio Climático, el Calentamiento Global, etc. era todo un fraude en el que estaban involucrados funcionarios públicos, grandes corporaciones incluidas las compañías petroleras, y académicos venales; que fue uno de los primeros en señalar el fraude del COVID; tal vez también tengamos que darle crédito al autor sobre estos puntos en particular. Que esos asesinatos o atentados rarísimos sólo sean una psysop  más. Ante cualquier duda, pregúntenle a @sashapak_

Ahora sí, los dejamos con el autor. Bienvenidos a la madriguera del conejo.

Atentamente,

Restaurar


Primero vinieron por este chico moldavo del que nunca has oído hablar. Pará, pará...


  Mi primer encuentro con Iurie Roșca empezó mal. Me había invitado a hablar en una conferencia que organiza cada año en Moldavia y no sólo me había pedido que yo pagara para asistir, sino que también nos había alojado a mí y a mis compañeros conferencistas en lo que, posiblemente, sea el peor alojamiento en el que he tenido que quedarme desde mis días en la espartana escuela preparatoria inglesa a la que todos apodábamos Colditz.


  Estaba en un antiguo sanatorio de la era comunista abandonado y en ruinas, con paredes de bloque y habitaciones estilo celda con camas estrechas y sin cortinas. La primera noche tampoco había toalla así que tuve que secarme con la muda de calzoncillos de ese día. Ah, y tampoco había nada para cenar. No nos habían explicado adecuadamente que se suponía que debíamos valernos por nosotros mismos. Cuando nos dimos cuenta de esto, todas las tiendas, restaurantes y de comida para llevar de la vecindad hacía tiempo que estaban cerrados.


Esa noche, con petulancia, reservé un vuelo temprano a casa. Pero estoy muy contento de que uno de mis compañeros co-conferencistas, Alex Thomson, me convenciera de no hacerlo porque después de eso me enamoré un poco de la ex comunista Moldavia. Y también desarrollé afecto y admiración por nuestro anfitrión Iurie Roșca (esa primera letra es una “I”, no una “L”. Su nombre se pronuncia Yuri).


  Como yo, Roșca es una ex periodista al que la realidad lo atrapó. Roșca, pensando que podía marcar la diferencia, cofundó un partido político, el Frente Popular de Moldavia, y se desempeñó como vicepresidente del parlamento moldavo y también, brevemente, como viceprimer ministro del gobierno moldavo. Pero era demasiado franco, demasiado honesto y demasiado valiente para durar mucho en un entorno tan corrupto y dominado por facciones.


  Su último error fue rechazar las propuestas de los rusos, que ven a Moldavia (que se encuentra en la frontera con Ucrania) como su dominio y no como el de Occidente. No es que sea locamente anti-Putin (a quien ve simplemente como un títere controlado por el Nuevo Orden Mundial, al igual que todos los demás líderes mundiales). Más bien, sostiene la peligrosa opinión de principios de que, por pequeña que sea, se debe dejar a Moldavia a su suerte en lugar de ser tratada como un mero peón por parte de Rusia o la UE.


De ahí su conferencia anual del Foro de Chisinau, en la que compañeros disidentes del Nuevo Orden Mundial, (la mayoría, aunque no todos, de persuasión cristiana), se reúnen en un pequeño pueblo en las afueras de la capital, Chisinau, para pronunciar discursos, que idealmente no durarán más de 15 minutos, sobre un tema de actualidad. 


El de este año fue Guerra sin restricciones: un enfoque holístico para el gran reinicio (Great Reset). Mi discurso se tituló Salmos contra el Nuevo Orden Mundial.


  Si buscas con atención, es posible que encuentres mi discurso enterrado aquí. https://rumble.com/user/chisinauforum 


Aunque creo que es uno de mis mejores, completamente improvisado, obviamente, porque soy un bastardo vago, y soy un bastardo especialmente vago cuando no estoy pago: casi nadie lo vio entonces ni lo escuchará en el futuro. 


Mi esposa, lo sé, estaría absolutamente furiosa conmigo si supiera que había volado a Moldavia en un supuesto viaje de trabajo "esencial" y terminé con un enorme desembolso y pronuncié un discurso que nadie verá.


  Pero todavía me alegro de haber ido. A veces hacés estas cosas por la camaradería y por la extrañeza general de todo, más que porque tenga algún sentido práctico. Curiosamente, al final incluso llegué a amar el extraño antiguo sanatorio con su escenario de teatro al aire libre (que presumiblemente se había utilizado alguna vez para montar producciones edificantes sobre héroes soviéticos representados por tropas de Jóvenes Pioneros), su sucio y cerrado gimnasio, su minúscula piscina vacía, su campo de fútbol y su amigable jardinero que intentó dialogar conmigo infructuosamente en rumano mientras un pajarito llamaba desde el bosque.


También me encariñé mucho con Moldavia, especialmente después de que dejamos la ciudad (solo hay una: Chisinau) y pudimos ver un poco del campo. Realmente es muy rural y todavía muy pobre. Para tener una idea de cuán pobres eran, en la era comunista los moldavos solían ver a Rumania (probablemente todavía lo hacen) como un paraíso de prosperidad. Posiblemente haya más caballos y carros que tractores. Supongo que el suelo será muy fértil, como lo es en Ucrania. Y el producto es delicioso. Las fresas que nos sirvió el obispo en el monasterio fueron algunas de las mejores que he comido en mi vida.


  La última noche, nos invitaron a cenar en casa de Iurie. Todo lo que había en la mesa (los kebabs de cerdo, el ajo -que te animan a masticar en dientes enteros-, la ensalada, el vino, etc.) procedía de un radio de cinco millas de donde estábamos sentados. De hecho, la mayor parte probablemente provino de un radio de 500 metros, porque Roșca, que no se hace ilusiones sobre lo que se avecina, se esfuerza por ser autosuficiente. Antes de cenar conocimos a sus cerdos, gallinas, gansos, etc. y recorrimos sus gigantescas casas de tomates.


  No es que esta preparación vaya a ser necesariamente de mucha utilidad para él. Al menos no si el gobierno moldavo se sale con la suya. Roșca corre ahora grave peligro de ser enviada a prisión, e incluso de morir en prisión, bajo cargos falsos. Uno de los delegados del foro de este año, Calistrat Atudorei, ha escrito un artículo con más detalles https://geopolitika.ro/articles/the-well-known-romanian-patriot-iurie-rosca-is-in-danger-of-being -encarcelado/. Pero esencialmente se trata de un caso político que basado en razones políticas.


Esto es lo que Alex Thomson tiene que decir sobre el tema:


  Iurie Roșca, a quien entrevisté el año pasado, corre peligro inminente de ser encarcelado por el régimen moldavo. Su oposición persistente y razonada a que Moldavia se una a la Unión Europea es bien conocida y ha sido enunciada en una serie de libros, así como en campañas y discursos públicos.


  La Presidenta Maia Sandu dio su consentimiento hace apenas dos semanas a una Ley de Traición que amordaza las críticas al rumbo del Gobierno moldavo hacia la UE y la OTAN, y a principios de esta semana la Unión Europea abrió formalmente conversaciones sobre la adhesión de Moldavia.


  No es difícil entender por qué Iurie Roșca ha sido citado a comparecer ante el tribunal en las últimas semanas, a pesar de un certificado médico de mala salud. No hay ninguna urgencia aparente en este asunto; ¡Los cargos penales se refieren a una acusación de 2009 y fueron presentados hace siete años! (Sin embargo, no se le informó de ellos durante el primer año).



Sospecho que Roșca podría haberse comprado un boleto de escape si se hubiera unido a la facción prorrusa de la política de poder local. Pero tiene demasiados principios y es demasiado lúcido para eso. Existe la tentación entre la gente antisistema [awake] en Occidente de imaginar que, de alguna manera, Vladimir Putin es una alternativa al Nuevo Orden Mundial. Pero Putin realmente no lo es, como me explicó Roșca en una de nuestras charlas. 


Putin habla lo que se habla y dice cosas (sobre el antisistema [awakening], el cristianismo, la tradición) que a los de la Pastilla Roja [Red Pill] les gusta escuchar. Desafortunadamente, Henry Kissinger lo eligió personalmente para hacer exactamente ese papel hace algún tiempo, y es un títere de la mafia jázara que ha estado gobernando Rusia desde la era de los bolcheviques. [Nota de la Editora: “awake” es un término que actualmente se usa para oponer a “woke”, siendo el primero el que se refiere a la derecha que se da cuenta de las cosas, “blackpille” o “redpilled” en contraposición a los “woke” o progresistas que apoyan el régimen].


Cuando salí de Moldavia hace apenas unas semanas, recuerdo haber coqueteado con la idea de lo idílico que sería el lugar para esconderse durante la próxima tiranía globalista: muchas personas con experiencia y habilidades prácticas, muchas de las cuales se negaron a recibir las vacunas del Covid; no hay escasez de alimentos. Pero fue, por supuesto, una ilusión. 


Realmente no hay lugar donde esconderse. El pobre y decente Iurie Roșca es sólo un referente. Allí, salvo por la gracia de Dios, vamos todos.


Si tiene la tentación de apoyar a Iurie Roșca de alguna manera, como espero que lo haga, aquí tiene algunas direcciones a las que puede escribir su queja. Iurie dice: “Queridos amigos y camaradas. Mi situación es realmente crítica. ¡Por favor escriba algunos mensajes para los medios y para nuestros funcionarios!


  1. Oficina presidencial: 

Para: Maia Sandu, Presidenta de Moldavia

cancelaria@prm.md, petitii@prm.md, presa@prm.md


  1. Para: Miembros del Parlamento: Presidente – Igor Grosu

 info@parlament.md, doina.gherman@parlament.md, igor.grosu@parlament.md, fpas@parlament.md,


3. Primer Ministro - Dorin Recean:

 cancelaria@gov.md, petitii@gov.md


4. Ministerio de Justicia, Ministra - VERONICA MIHAILOV-MORARU:

secretariat@justice.gov.md, petitii@justice.gov.md


5. Fiscal general – Ion Munteanu:

proc-gen@procuratura.md, presapg@procuratura.md


6. Consejo Superior de la Magistratura:

petitie@csm.md, secretariat@csm.md



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