NIDO DE ZURDOS
Y ojalá nunca más nadie le preste a la Argentina para que nunca más nos roben los políticos y la casta de “empresaurios” corruptos y prebendarios
Autor: Juan Martín Perkins
Sabemos lo que representa la ONU y no vale la pena gastarse en explicarlo, pero podría graficarse en una sola frase: Nido de zurdos hipócritas empeñados en obligar a todo el mundo a financiar la vida de reyes de sus burócratas y aceptar su agenda perversa.
Tiene cero autoridad moral, cero prestigio y décadas de ineptitud para aportar algún mínimo beneficio a la humanidad (su consejo de seguridad jamás paró una guerra).
En las redes sociales se ve como políticos oportunistas chillan con despecho por el desaire que significó, según ellos, el discurso del presidente ante la Asamblea General.
Se desgarran las vestiduras acusando a Milei por espantar las inversiones y malograr las oportunidades para obtener financiación de los programas de la agenda globalista.
No les importa el contenido aberrante ni la pérdida de soberanía que implica adherir… hay efectivo y eso los pierde.
En tiempos de Macri, se le abrió la puerta al diablo y se puso en debate el aborto para destrabar la ayuda financiera y afrontar los vencimientos de deuda contraída por Cristina Kirchner. (“yo no estoy de acuerdo, pero soy democrático”, decía Macri).
Declaró abiertamente y con actitud servil que adhería a la agenda 2030 impulsada por la ONU. No importó la matanza masiva de niños, ni ponernos de rodillas.
Por la plata baila el mono, sobre todo cuando está agarrado de los testículos.
Les costó perder la elección, para que después Fernández lograra sancionar el aborto.
El Papa ni chistó.
Hoy, las hienas lloriquean acusando a Milei de excluir a Argentina del Pacto del Futuro en la ONU. Bah, chillan por todo, la pobreza, el gas pimienta, la inflación, todo es culpa de Milei.
Chillan que el “loco salvaje” es un grave retroceso por abandonar el compromiso hacia el desarrollo “sustentable”, los acuerdos multilaterales y la cooperación.
Todo basura discursiva del progresismo hipócrita, inepto y corrupto, todo cháchara a costilla del esfuerzo y la inocencia de los países menos desarrollados, a los que endeudan, explotan y manipulan.
En mi opinión, el presidente hizo el discurso perfecto. Para eso lo voté y le agradezco por dar pruebas de que mi voto no fue defraudado.
Argentina debe ser un país soberano, dueño y artífice de su destino, que asuma su condición y la sepa defender fijando sus propias reglas y políticas.
Libre y soberano sin arrodillarse ante nadie, sin aceptar agendas foráneas por la indignidad de conseguir el favor de un crédito para saciar su adicción al mangazo.
Y ojalá nunca más nadie le preste a la Argentina para que nunca más nos roben los políticos y la casta de “empresaurios” corruptos y prebendarios.
Habrá que apechugar, pero basta de vivir de la jeta.
Recuerdo el Evangelio con Jesús enviado por Poncio Pilatos ante Herodes, rey de Galilea, gobernador alcahuete delegado por los romanos (imperio de la época), asesino déspota de turno que venía de cortar la cabeza de Juan Bautista a pedido de Salomé y recibió a Jesús por curiosidad, para pedirle que haga un “milagrito” para diversión a cambio de su vida.
Jesús no emitió palabra y fue devuelto a Pilatos para su crucificción. No se molestó en tener buenas relaciones con los poderosos. Soportó burlas y escarnios, pero dejó claro que los hombres somos lo que somos ante Dios, no ante los otros hombres.
Y menos ante los hombres de una elite de idiotas que impulsan una agenda de arrogante intervencionismo y perversa ingeniería social.
El país nos reclama y exige que los argentinos juguemos el partido MORAL de la libertad.
Dios nos ayude… La ONU se abstenga… y nos deje en paz.
Juan Martín Perkins.
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