MAFIA NIGERIANA
En Palermo, primera investigación de la
'cosa negra'.
Por: Giuseppe
Pipitone
https://www.ilfattoquotidiano.it/2015/10/19/mafia-nigeriana-il-patto-con-cosa-nostra-agguati-con-lascia-e-sangue-bevuto-a-palermo-prima-inchiesta-sulla-cosa-nera/2105873/
Traducción: Pachira (@cuabiapellarolo y @BGSNAFU)
No es la historia de una familia
de Cosa Nostra. No es la historia de
una pandilla de la Camorra que cruzó el sur de Italia para poner "asuntos" en la
tierra de Sicilia y fortalecer las alianzas con la "cúpula". No
tiene nada que ver con los "escapados", las familias masacradas
por la segunda guerra de la mafia en los años 80, que huyeron a los Estados Unidos
y de allí reaparecieron en Sicilia en los años 2000. Sin embargo, la
última investigación realizada por el fiscal de Palermo, ha
revelado la existencia de una asociación
criminal de la mafia, con líderes y seguidores, ritos de iniciación, métodos de convicción violenta, protegidos por la forma
más arcaica de inmunidad: omertà.
Después de un siglo y medio de
historia criminal vinculada a Cosa nostra, en Sicilia, de hecho hay una nueva
mafia, que ha arraigado en Palermo, tejiendo alianzas y dictando leyes entre
los callejones del centro histórico. Aquí los nuevos jefes vienen de muy
lejos, no hablan siciliano, y su organización tiene un nombre y una historia
consolidados en otro continente: lo llaman Hacha Negra, (Black Ax), el Hacha Negra , y
nació en los años 70 en la universidad de Ciudad de Benin, en Nigeria, como una
hermandad de estudiantes. Al principio, fue una pandilla a medio camino
entre una asociación religiosa (las llaman cultos) y una pandilla criminal, que
establece ritos de iniciación y requiere que sus afiliados usen un tocado, una
boina con una calavera y dos tibias cruzadas, como el símbolo de los piratas. Sin embargo, durante algunos años, los tentáculos de este nuevo
pulpo criminal también han llegado a Italia, donde los patrones nigerianos han
comenzado a establecer la ley en los suburbios de ciudades como Brescia y Turín. Tráfico de
drogas, manejo de prostitutas, y un régimen de terror muy similar a lo que es la
marca registrada de la mafia de nuestra casa.
Ballarò, cuna de la mafia nigeriana
Los
investigadores de Palermo comienzan a darse cuenta de que bajo la montaña
Pellegrino hay una nueva mafia de pandillas peligrosa. Ballarò ,
uno de los mercados históricos de la ciudad: dos ciudadanos nigerianos son
atacados con puños, patadas y golpes de hacha quirúrgica . Lo que ven
los agentes del equipo móvil en la oscuridad es una escena espantosa: al final
de la expedición punitiva, de hecho, las dos víctimas están marcadas con un corte
profundo, probablemente hecho con un machete, que corta la parte superior de la
cara.
Las
investigaciones se dirigen inmediatamente a otros tres ciudadanos de Nigeria que viven en los callejones de Ballarò: Austine Ewosa, alias Johnbull, Vitanus Emetuwa , alias Acascica y Nosa Inofogha . "Los
golpeamos porque acosaron a mi mujer", dice Johnbull, el líder de los
tres: una excusa que se usa a menudo en otras ciudades italianas para
justificar las peleas entre nigerianos. ¿El de Ballarò es, por lo tanto,
sólo una regulación de cuentas entre compatriotas? Johnbull no solo es el jefe del trío, sino que
probablemente también sea uno de los jefes del Hacha Negra en Palermo. Ballarò
es su reino, y es entre esos callejones que Johnbull y sus hombres manejan el
tráfico de drogas, amenazando y matando a todos aquellos que quieren colocar
la droga sin someterse a la banda.
El pacto con la Cosa Nostra
Los investigadores se hacen una pregunta: ¿cómo es posible que en Palermo una organización extranjera administre un vecindario completo sin que los padrinos, los que gobiernan los mandatos históricos de la ciudad, no tengan nada que decir? Giovanni Di Giacomo es un jefe autoritario, un mafioso con un sólido historial criminal. Hoy se encuentra en prisión perpetua. Fuera de su prisión, sin embargo, aún conserva su influencia: hasta el punto de que logra nombrar a su hermano Giuseppe regente del clan Porta Nuova. Una tarea que no durará mucho, ya que el 12 de marzo de 2014, Giuseppe Di Giacomo será asesinado a plena luz del día en las calles del distrito de Zisa. Pero él ya había comenzado a informar de todo a su hermano detenido. Todas éstas conversaciones en la cárcel, fueron grabadas
En una de esas entrevistas, Giovanni Di Giacomo solicita información sobre Ballarò, el distrito histórico en el centro de la ciudad. "Allí hay turcos", dice su hermano, y en Palermo durante más de medio siglo, cuando alguien dice "los turcos", se refiere genéricamente a los negros. Por eso Di Giacomo pide aclaraciones: "¿Qué turcos?" "Los nigerianos" aclara el jefe de Porta Nuova. "Pero son respetuosos - agrega - vienen a esperar en casa para hablar, preguntar ... y luego almacenan". Una declaración que, para los investigadores, explica claramente cómo Cosa Nostra en Palermo ha dado luz verde a la presencia de los nigerianos de Black Ax en el área. Y significa, prácticamente, que en los callejones olvidados de Ballarò los nigerianos "respetuosos" mantienen enormes cantidades de drogas, con la aprobación de las familias de Cosa Nostra, ahora diezmadas por arrestos y pocos soldados leales para controlar todos los rincones de la ciudad. Así es como Palermo se ha convertido hoy en día en el mandato de las pandillas nigerianas, con la bendición de los herederos de Salvatore Totò Riina y Giuseppe Pippo Calò*. Y es por esta razón que los fiscales han decidido desafiar a la banda de Johnbull por el intento de asesinato y tráfico de drogas exacerbado por la mafia.
El jefe negro que está en Catania
Y mientras que el tribunal de Palermo probará por primera vez a un grupo de nigerianos que actuaron de la misma manera que la mafia, hace casi tres años que los agentes secretos de ' Aisi, agencia de información y seguridad de la república , la agencia de seguridad interna, compilan información sobre Gabriel Ugiagbe , nigeriano de 33 años, de nivel superior jefe Eiye , otra importante organización criminal de Nigeria, que a menudo ha provocado peleas contra los hombres del Hacha Negra, sólo para volver a fomentar las alianzas en el nombre de un solo objetivo: negocio.
Esto es lo que hace Ugiagbe: gestionar el tráfico de drogas y resolver los problemas espurios que surgen entre su organización y otras mafias extranjeras en Italia. Y así es como Ugiagbe se ha convertido en un jefe autoritario en la mitad de Europa. Desde su residencia en Catania, en el barrio Librino migra constantemente al extranjero, Austria y España, también en el norte de Italia, una tierra de conquista para mafias nigerianas ya durante varios años.
El rito de iniciación
Antes de que dos tribunales italianos hubieran emitido condenas por asociación ilícita contra las bandas de Nigeria, siempre las mismas: Black Ax y Eiye, en 2009, en Brescia, fueron sentenciadas 416 personas, con penas de 5 a 7 años, doce personas, la "cúpula" de la mafia nigeriana en la ciudad lombarda, encabezada por Frank Edomwonyi en la ciudad. "hagan uso de la fuerza de intimidación, así como la condición de sometimiento y la conspiración de silencio que se impuso en la observancia de una estricta disciplina interna, el respeto y la obediencia a las directrices de los vértices con la previsión de sanciones corporales en caso de incumplimiento, Paolo Savio , quien en su investigación también descubre cómo la afiliación a la familia mafiosa preveía un ritual especial: beber sangre humana, recitar extrañas invocaciones.
Más o menos como la forma arcaica de afiliación con Cosa Nostra, que incluía un corte en el dedo para hacerlo sangrar, y un juramento pronunciado mientras se hacía una imagen sagrada para quemar junto con esa sangre.
En Torino, la capital piamontesa, Eiye y Black Axe entraron en una guerra en las calles de la ciudad con cuchillos, machetes y hachas, que atraen la atención de los investigadores. Parecía un caso aislado, una guerra de pandillas que se detuvo solo en los suburbios de Turín: pero ahora la mafia hecha en Nigeria ha venido a echar raíces también en Palermo.
*Salvatore Totò Riina: Capomafia, 1930- 2017
y Giuseppe Pippo Calò: El cajero de la mafia, bajo arresto.
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