UNA MANO LAVA LA OTRA: PACTO PRO-K
Dólares frescos para financiar
la fiesta de la Cleptocracia.
la fiesta de la Cleptocracia.
En la política argentina se suceden los mismos actores, van cambiando de discurso según a qué público o grupo intenten atraer. De allí que las incoherencias sean muy comunes.
Pichetto puede pasar del menemismo al kirchnerismo, y luego al macrismo. Felipe Solá puede pasar del menemismo al duhaldismo, y de ahí al massismo opositor a los K, para terminar como canciller del nuevo kirchnerismo. Y así, innumerable cantidad de veces, lo necesario para mantenerse cerca de algún cargo público.
Que se agrega a los numerosos negocios inmobiliarios en la ciudad de Buenos Aires, aprobados con votos K y M. O los apoyos cruzados, de Lipovetsky a los K, ahora, o de Bossio a los M, ayer.
Son famosos los videos de Alberto Fernández criticando a Cristina Kirchner, o hablando de una política económica muy diferente a la que finalmente está implementando en la actualidad, con rumbo de colisión, él mismo.
Me quiero detener en una frase: "Sintonía Fina".
Kicillof había comenzado con la misma, emitiendo bonos para pagarle al Club de París, a Repsol, etcétera, pero no pudo avanzar más porque el FMI le exigía al kirchnerismo admitir un delito, el fraude en las estadísticas públicas con la inflación y con el crecimiento del PIB.
Sino fuese por ese detalle, el kirchnerismo hubiese podido arreglar el default y volver a emitir deuda, en un mundo con crédito regalado, incluso para los deudores más riesgosos. Dólares frescos para financiar la fiesta de la Cleptocracia.
Le permitió seguir pagando la fiesta de estructuras estatales sobredimensionadas en todos los niveles
Al que le quedó esa tarea fue al macrismo, que le permitió a todos los gobernadores empapelar los mercados financieros con bonos en dólares. También le permitió seguir pagando la fiesta de estructuras estatales sobredimensionadas en todos los niveles. O de contratos superfluos con proveedores bien cercanos a los funcionarios.
Además, de permitirle actualizar las tarifas de servicios públicos para que estas empresas algo mejoren el sistema energético. Una señal mínima de cambio frente a los acreedores.
Resuelto el default, el macrismo también pudo emitir bonos en dólares para pagar los numerosos juicios contra la Argentina surgidos durante el kirchnerismo. Algunos muy sospechosos como el caso YPF, en particular con Eskenazi y su particular relación con los Kirchner.
el círculo vicioso
La cuestión es que la política económica del macrismo se limitó a hacer la sintonía fina que el kirchnerismo no pudo terminar de implementar.
Y ahora, el círculo vicioso continúa con Vicentín.
El macrismo le dio créditos ilegales a través del Banco Nación, violando los límites del Banco Central. Y ahora el kirchnerismo gobernante, en lugar de dejar que el juez que maneja el concurso liquide los activos de la empresa y le pague a los acreedores e investigue qué sucedió, se la apropia ilegalmente.
Preparando el terreno para que haya juicios por parte de los actuales dueños contra la ilegal expropiación. Además de generar una maniobra que le permitiría a González Fraga, ex presidente del Banco Nación, no pagar por su mala praxis o dolo ante los tribunales.
En definitiva, parece que los actores son los mismos, se van cambiando de lugar, y que para los negocios, hay pacto Pro-K, donde una mano lava la otra.
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