CULTIVAR EL SUELO ES SERVIR A LA PATRIA


Autor: Juan Martín Perkins (@JuanMPerkins)

-Escribí algo para los 10 años, me pide una amiga piquetera.
-Algo sentido y lindo. Vos sabes decir bien. Algo como esas cosas que decías para motivarnos en aquellos momentos difíciles y llenos de incertidumbre.


Aquellas noches en que teníamos que explicar a nuestros hijos como era eso de luchar por el respeto a las instituciones de la República y, a la vez, cortar la ruta.
¿Cómo explicar la contradicción de defender la ley de leyes… violándola. Nada fácil. Hemos vomitado alguna noche por el disgusto y la angustia!!
Una noche de asamblea, me rescató un señor que se acercó a la carpa. Por él fui hasta el final. Él me dijo que había estado observando y creía que nuestra causa era especial. Me pidió que no aflojáramos y que la mantuviéramos pura para que no se transformara en un reclamo fariseo.
Lo recuerdo diciendo: vos, tu esposa y estos muchachos son distintos. Están por algo superior.
Ese señor, con sus palabras, nos sacó del estante de la angustia, la culpa y la vergüenza y nos puso en el del orgullo por la causa con la misión de preservarla pura.
Pura como la Purita Uriarte.



Y empezó a obrar el milagro. En cada pueblo alguien entendió cual era el norte y todos entendimos que había que deponer “categorías” y aprender a ser un genérico. Y aprendimos a ser “EL CAMPO”.
El milagro siguió por entender que el genérico debía ser mas abarcador y generoso… y fuimos EL INTERIOR. Hasta que un 15 de Julio glorioso fuimos al desafío del monumento a los Españoles y la Capital nos abrazó y fuimos la ARGENTINA.
Ese 15 de Julio tuve la certeza. Escribíamos una historia que saltaba de los diarios para vivir en los libros.
Cuando se hizo la hora y Buenos Aires bajó a abrazarnos… lloré.



Los descastados fuimos pueblo. Todos argentinos en la calle por una causa pura que supimos unirnos y reconocernos.
Dos días después, tras una larga vigilia de toda la noche sin dormir, con la ciudad en la calle y la fuerza espiritual de ciudad y campo unidos, ¡todos juntos hechos ARGENTINA torcimos la historia!.
No fue algo que pasó graciosamente, ni fue un milagro, como dije anteriormente… fuimos ¡NOSOTROS!
ARGENTINA AUTOCONVOCADA!!
10 años …. Ta que lo parió, como pasó el tiempo, ¡carajo! 



Desde entonces, nuevamente y como siempre, convivimos con ese desprecio, casi encono, que se le tiene al campo. No solo por parte de los políticos, también los comunicadores, periodistas y la elite intelectual cultural, que nos ven peyorativamente.
Es como si tuviéramos que tener una vergüenza de ser. Un apuro por irnos del campo, este lugar tan inferior y primario. Y ser doctores, abogados o políticos sin fe en el campo y con esa envidia inconfesada.
Parece que ser paisano y disfrutar de serlo, estuviera reñido con la sensibilidad y la técnica.
Hay como un complejo.
Se dice peyorativamente “maneja como un patrón de estancia”… como si fuera una descalificación, cuando en realidad, lo mejor manejado que tiene nuestro país son sus Estancias y establecimientos agropecuarios. 
10 años… y otra vez a foja cero.



A los paisanos, a los gauchos, a los gringos, a los brutos de gorra, con nuestras familias, siempre invisibles y callados. A todos nosotros… Feliz día del amigo!!  
Es cuestión de bajar la frase fría del cartel y hacer de carne hueso eso de “Cultivar el suelo es servir a la patria” Cultivar, criar, engordar, domar…. Amar. 
Amar  principalmente, porque sino no se entiende.
Aguante #ElCampo. Vamos Argentina!!

Juan Martín Perkins



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