ECONOMÍA SOCIAL Y SOLIDARIA
La Economía Social y Solidaria (ESS) es, ni más ni menos, la precarización laboral.
Lo sucedido antes de la cuarentena decretada por el gobierno es agua bajo el puente. Los discursos del Presidente de entonces resultan hoy obsoletos.
Dicho esto, alguna vez terminará. Ése día deberemos tener alguna organización económica. Para adivinar sólo disponemos de los discursos presidenciales.
Economía Social y Planes Sociales
En diversas oportunidades dí mi opinión sobre los planes sociales (en La Prensa, en TLV1 y en Restaurar).
Los planes sociales se complementan con la Economía Social o Economía Social y Solidaria.
La definición según Wikipedia: “La economía social o economía social y solidaria refiere principalmente a las relaciones de producción y distribución que están organizadas por el principio de solidaridad y no persiguen el lucro”.
FLACSO imparte un posgrado: “Economía social y solidaria y asociativismo”.
El Banco Mundial “...apoya el desarrollo social escuchando a los pobres y promoviendo sus opiniones en el proceso de desarrollo; comprendiendo y abordando sus necesidades, prioridades y aspiraciones, y creando instituciones formales e instancias informales”. Presuntuoso y displicente.
Según los progres la “economía social” es la “economía buena” ya que no persigue el lucro, en oposición de la “economía mala”, que sí lo hace.
¿Es así?
Los burócratas que hablan de economía social incluyen al cooperativismo. Pero en realidad el cooperativismo se refiere a una búsqueda cooperativa del lucro. Ejemplo: productores de frutas de Entre Ríos arman una cooperativa para fabricar mermelada. Conjuntamente compran un terreno, edifican un galpón, maquinaria, fabrican mermelada y la comercializan. Es una forma de producción y de inversión y de distribución del lucro. Eso no quiere decir que no lucren con su trabajo. Sólo que se organizan de esa manera.
También incorporan a la definición a las fundaciones y asociaciones civiles, en el entendimiento de que no hay búsqueda de lucro sino de asistencia a otras personas o búsqueda de fines no lucrativos. Ejemplo: jugar al handball.
Hasta acá, todo suena a buenismo.
¿Qué dijo el presidente en los discursos del 10 de diciembre 2019 y del 1° de marzo de 2020?
10.12.2019:
“Queremos un Estado presente, constructor de justicia social, que le dé aire a las economías familiares...La economía popular y sus movimientos organizados, el cooperativismo y la agricultura familiar serán también actores centrales de estas políticas públicas”.
…
“Hay más de 1.200.000 jóvenes que no estudian ni trabajan, debemos garantizar el derecho al primer empleo a través de becas solventadas por el Estado para que jóvenes se capaciten y trabajen en empresas, pymes, organizaciones sociales y de la economía popular y la agricultura familiar”.
01.03.2020:
“En todo el país comienzan a surgir ferias de la economía social y de la agricultura familiar,...”.
Economía Social según los políticos argentinos
Ya conocemos la definición académica de “economía social”. Actividad económica pero no para fines de lucro. Un oximorón. Si es económico, es con fines de lucro.
En la vida se hacen infinita cantidad de cosas sin fines de lucro: practicar deportes amateurs, pertenecer a algún culto y colaborar, hacer ensaladas para un asado con amigos, peinar a los hijos, ayudar en tareas comunitarias, ir a bailar, abrazar a la madre, enseñar a tocar la guitarra a una sobrina, acompañar a una amiga al médico, besar al novio. La mayoría de la vida de uno la emplea en actividades no lucrativas.
Pero cuando uno hace actividades económicas, son de lucro. Si uno hace un budín para los hijos, es sin fines de lucro. Si uno hace un budín para venderlo en una feria comunal, es de lucro.
Las cooperativas de recolección y clasificación de basura que gerencia Grabois, las cooperativas de talleres textiles que hay en capital o gran Buenos Aires, son de lucro.
Tildar esas actividades de "economía social" no es más que un artilugio para no pagar impuestos ni respetar las leyes laborales.
Todos los talleres textiles que regentean “los trabajadores de la economía popular” no respetan los convenios colectivos del sector, ni en el monto de los sueldos, ni en el pago de las cargas sociales, ni en las normativas de protección del trabajador. En algunos casos ni siquiera se respetan las normas de seguridad laboral.
Todos los talleres textiles que regentean “los trabajadores de la economía popular” no respetan los convenios colectivos del sector, ni en el monto de los sueldos, ni en el pago de las cargas sociales, ni en las normativas de protección del trabajador. En algunos casos ni siquiera se respetan las normas de seguridad laboral.
En C5N cada tanto llevan como ejemplo una cooperativa que hace pan, pan dulce para las Fiestas y facturas. Hacen alarde de que los productos son más baratos que en una panadería. Efectivamente. Porque los trabajadores son “socios”. Son monotributistas, cobran lo que se puede y no los mínimos de convenio, y no pagan ningún impuesto al que los fiscos someten a cualquier panadero. Y esto no desmerece en absoluto el esfuerzo de los trabajadores de la cooperativa, que se desloman y seguramente venden un producto de primera calidad. Sólo digo que trabajan para vender pan y ganarse el sustento (como cualquiera) y que pueden vender más barato porque a) evaden algunos de los impuestos - no todos -, b) ganan menos que un trabajador sindicalizado.
Entonces, el ejemplo del que habla el oficialismo, no es ni más ni menos, que la precarización laboral.
En lugar de venderla como la panacea para ganar más dinero (el discurso del Foro Mundial de Davos, o de los liberales locales que se babean con los talleres textiles de Bangladesh donde los obreros ganan dos dólares por día), lo venden como la solución a la desocupación de los sectores populares. ¿Pero no es el mismo hecho con distinta presentación? ¿No estamos en ambos casos hablando de precarización laboral?
¿No están promoviendo la precarización laboral y la economía en negro con un discurso vendible para los “progres”?
Hace unos años se celebraron en simultáneo el Foro Mundial de Davos y el Foro Social (iniciado en Brasil). Lula, en ese entonces presidente de Brasil, era la estrella invitada del primero, al tiempo que promovía el segundo. El Socialismo XXI mientras dice estar contra el orden mundial facilita su instalación. Desmantela las instituciones que permitieron una mejora de vida de gran cantidad de personas y reviste con una pátina de rebeldía la aceptación de las reglas de juego de la globalización.
Fileteros
Un caso, que está lejos de ser el único, es el de los trabajadores de la industria del pescado. En lugar de ser trabajadores sindicalizados, la patronal organiza cooperativas de trabajo que venden el servicio de fileteado a las industrias. De esa manera: a. cobran menos que el mínimo de convenio, b. son monotributistas, por lo tanto la patronal no paga cargas sociales, c. no tienen vacaciones pagas, horas extras, licencia por enfermedad. Según el sindicato, seccional Mar del Plata, miles de trabajadores del sector están en esta condición.
¿Esto es lo que defienden los progres?
Intendentes del conurbano promocionan como gran cosa las ferias de trueque o de ventas de comidas, cosas usadas y prendas de vestir. En realidad el único beneficio es no tener que pagar ABL, IVA, IIBB e impuesto al cheque. La “gran cosa” es condenar a las personas a vivir en negro.
Los trabajadores cooperativos también reciben planes sociales (a veces, no siempre), por lo que el estado paga parte del costo laboral del empresario. A lo que se le suman las defraudaciones al estado por sobreprecios o desvíos de fondos en merenderos y bolsones de comida.
Todos los “referentes” del sector, cobran por hacer el trabajo de gerenciamiento de la “economía social”. Por lo tanto, estos trabajadores “sociales”, no le dan su plusvalía a un empresario, pero sí a los “referentes” y a la “agrupación” y/o a la “causa”.
Pero sobre todas las cosas, es una forma de llevar a millones de personas al redil del trabajo precarizado, como le gusta a los globalizadores de Davos.
Los que se llenan la boca hablando contra el “neoliberalismo” sostienen institutos que hacen...exactamente lo mismo.
Dinero
Ahora bien, ¿cuál es la ventaja de la “economía social” en Argentina? El no pago de impuestos. Trabajar en negro o directamente tener regímenes especiales.
Solución
A diferencia de lo que propone el Presidente, no será la economía social la que acabe con la desocupación.
Objetivo: La Argentina debe volver al pleno empleo. A que la totalidad de la población trabajadora esté en blanco. Para que eso suceda hay que eliminar los impuestos al trabajo, bajar los impuestos a la intermediación y comercialización. Y perseguir el contrabando. En resumen: eliminar todo incentivo a la evasión impositiva.
Con esas medidas el oximorón de la economía social desaparece, porque desaparece su razón de ser.
En lugar de trabajadores de segunda, obligados a enrolarse en cooperativas de trabajo por funcionarios coludidos con patronales abusivas, tendríamos trabajadores de primera únicamente.
No serán los socialdemócratas del Frente de TodEs o de Juntos por el Cambio quienes bajen impuestos y dignifiquen al trabajador y al empresario que arriesga su dinero y cumple con las leyes.
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Nota de la autora:
En la investigación para este artículo tuve la sensación de entrar en un mundo paralelo. En la "Dimensión Desconocida". Es un supernegocio. Con càtedras "ad-hoc" en las universidades, institutos, becas, subsidios, puestos en intendencias, provincias y nación, compras del estado a mansalva.
Un universo paralelo. Y le da de comer a mucha gente. No a los "trabajadores del campo popular" pero sí a muchos burócratas.