FICCIONADOS
Política, Comunicación y Ficcionalización
(La Verdad es Mentira)
Autor: Marcos (@kowalskimarcos)
En la primer mitad del siglo XX, los medios y los pasos y la forma argumentativa a seguir fueron desarrollados en un trabajo de McCann Erickson en el libro “Cómo hacer propaganda”, induciendo la compra o venta inductiva por pasos, que según ese autor eran:
(1) de lo desconocido a lo conocido,
(2) de lo conocido a la comprensión de lo que se ofrece,
(3) de la comprensión a la necesidad de tener lo ofrecido,
(4) de la necesidad de tener el producto a su compra.
Se tenía que desarrollar a través de medios, que se dividían en:
(a) boca a boca (El más lento pero efectivo),
(b) la vía publica (carteles, pancartas etc.) y sistemas auditivos (en ese entonces sólo la radio) y audiovisuales (en ese entonces el cine); en lo argumental, la publicación de referencia decía que un buen anuncio debía exaltar el producto a vender en todos sus aspectos positivos, mediante varios de los que hoy llamaríamos “TIPS”.
Proponía recurrir a presentar un problema y solucionar el mismo por el producto ofrecido (el ejemplo del libro era “para el dolor de cabeza.- ¡¡¡Geniol!!!") recurrir al peligro, económico o de muerte, a la nostalgia, a los niños, al sexo o al amor romántico, pero siempre priorizando como solución al producto ofrecido.
El camino publicitario arriba descripto, se modifica durante la segunda guerra mundial. Cada bando necesita levantar el ánimo (moral) de sus soldados y, si es posible, llevar desazón al bando enemigo.
Los pasos son los mismos en cuanto al esquema básico pero los medios acompañan el avance que la tecnología de la época proporciona.
Es en lo argumental es donde se modifica el mensaje.
Se parte de hechos reales acaecidos en el campo de batalla, pero se los ficcionaliza en función de la línea ordenada del comando estratégico de las fuerzas, y se transforma la propaganda en un apéndice de la inteligencia de guerra o combate.
Se modifica la difusión y uso de la información para los fines, como dijimos, de alentar a propios y desalentar a terceros, pero además este sistema se comienza a usar para orientar la opinión publica hacia fines políticos, creando un consenso ciudadano inducido sobre determinados temas.
Es decir induciendo la libre elección del hombre hacia lo que hoy conocemos como “políticamente correcto”.
Todo esto fue mucho más allá: Es por todos conocida la situación europea de post-guerra, con millones de muertos, mutilados, viudas y huérfanos, más la destrucción de pueblos y ciudades.
Después de semejante desastre era lógico el anhelo de apegarse a la vida y de vivir cada día como el último. También que ante las tragedias personales muchos perdieran su fe en Dios.
Por eso no es raro que en la Alemania desnazificada aparezca la simiente de la “social democracia”, con el fundamento filosófico que le da la llamada “escuela de Frankfort” y su filosofía critica, para la que todo es construcción social y está sujeto a critica por los hombres.
Y aquí es donde se comienza a percibir los cambios de paradigma, lo “nuevo” es la “critica“ a todo, lo natural es una mera construcción.
La ontología no tiene sentido para esta corriente que “estudia” al hombre desde la crítica y exaltando lo marginal, pero como en el inconsciente colectivo hay temas que no pueden aceptarse, sencillamente porque son anti-naturales, tratan de descalificar incluso la condición humana.
Se creó de esta forma la actual sociedad de la tolerancia, que falta de fe en Dios no tiene ideales fijos y, como resultado, tampoco una clara división entre el bien y el mal.
Comienza a aplicarse a lo ya descripto como “propaganda”, una técnica que permite cambiar la actitud popular hacia conceptos considerados totalmente inaceptables.
La Ventana de Overton
La “ventana de Overton” es una teoría política que describe como una ventana al rango de ideas que el público puede encontrar aceptable y que se denomina de esta manera por Joseph P. Overton, ex vicepresidente del Centro Mackinac, uno de los institutos de investigación de políticas públicas de EEUU.
Mediante este método se cambia el viejo paradigma de la propaganda expuesta por McCann Erikson y los cuatro pasos de lo desconocido a la compra que hemos reproducido por;
(1) de lo Impensable; un disparate que la sociedad considera como un fenómeno absurdo e impensable; para cambiar esa percepción, los argumentadores del disparate usufructuando la libertad de expresión, trasladan la cuestión a la esfera científica, porque para los ciencia “critica” no hay temas tabú, sólo cosas que estudiar y descubrir, aun mediante imposturas intelectuales poco documentadas, por lo tanto, es posible celebrar, por ejemplo, una conferencia de tipo histórica, además, hay que crear algún grupo extremo que defienda el disparate, que se haría muy famoso en un breve espacio de tiempo al citarlo numerosos medios de comunicación mediante el pago de promociones no tradicionales (PNT). Como resultado de la primera etapa de Overton, el tema inaceptable, en un principio, empieza a discutirse.
(2) En esta etapa, hay que seguir citando a la ciencia para proteger el discurso y que no aparente ser una opinión personal, el refugio es decir que ignoramos tener conocimientos sobre el disparate de marras, ya que si alguna persona se niega a hablar de ello será considerado un cínico intolerante, también es necesario crear un eufemismo para el propio fenómeno para disociar la esencia de la cuestión de su denominación, separar la palabra de su significado, en lugar de llamar al disparate por su nombre, como en la vieja humorada de llamar a un borracho beodo, creando un precedente de referencia ya sea de tipo histórico, mitológico, contemporáneo o simplemente nacido de la imaginación, pero lo más importante es que sea legitimado, para que pueda ser utilizado como prueba de que el “disparate” puede ser legalizado.
(3) Los adversarios reales a esos conceptos, es decir, el hombre común que no quiere ser indiferente al problema, intencionadamente lo convierten, mediante los medios de difusión, para la opinión pública en enemigos “reaccionarios” son presentados con la imagen de psicópatas, oponentes agresivos al disparate que se radicalizan queriendo eliminar a los disparatados. La “ciencia” y los medios de comunicación en esta etapa muestran al mundo que durante la historia de la humanidad siempre hubo disparates, y que eso era normal.
(4) Los medios de comunicación, con la ayuda de caras conocidas y políticos subidos al carro del progreso, ya hablan abiertamente del “disparate”. Este fenómeno empieza a aparecer en películas, letras de canciones famosas, vídeos o inundando las redes sociales en toda clase de formatos. En esta etapa, comienza a funcionar también la técnica que supone la promoción de las referencias a los personajes históricos destacados que practicaban el disparate.
(5) Esta categoría supone ya empezar a preparar la legislación para legalizar este novedoso fenómeno. Los grupos de presión se consolidan en el poder y publican encuestas que supuestamente confirman un alto porcentaje de partidarios de la legalización del disparate en la sociedad. Teóricamente en la conciencia pública se establece un nuevo dogma “prohibir el disparate está prohibido”:
Ésta es hoy una técnica típica de los progres-liberales- socialdemócratas-neo marxistas y funciona debido a la tolerancia como pretexto para la proscripción de los tabúes.
Durante la última etapa del movimiento de las ventanas de Overton, de lo popular a lo político, la sociedad ya ha sufrido una ruptura, pues las normas de la existencia humana se han alterado o han sido destruidas con la adopción de las nuevas leyes.
Todo esto puede verse en temas como el aborto, la eutanasia, el movimiento vegano, etc.
Lógicamente, todo este proceso encuentra un tremendo obstáculo, no tiene en cuenta el hombre tal cual es, podrán tener relativo éxito en un principio y entre determinadas personas demasiado “intelectualizadas” e ideologizadas, a través de lecturas de diversas imposturas intelectuales, pero la gran mayoría de los hombres tiene enraizados los sentidos religiosos y nacionales en lo profundo de su ser y terminan siendo rechazados todos los disparates que se le planteen por anti- naturales.
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