UNA MIRADA AL MUNDO Y SUS CONFLICTOS
Autor: Marcos (@kowalskimarcos)
El panorama político –estratégico mundial, dinámico y particular que se presenta al observador ofrece aspectos susceptibles de ser vistos desde diferentes enfoques, habrá quien vea tremendas conspiraciones económicas, políticas y morales, otros un enfrentamiento agonal entre potencias, algunos percibirán un aumento considerable de la carrera armamentista mundial y también quienes lo analicen dividido en regiones o incluso países, pero lo único que todos convendrán es que el nivel de conflictos de todo tipo, agudizados por la denominada “pandemia de COVID-19” derivara en un cambio de paradigmas sociales, políticos y económicos trascendental.-
Veamos las distintas situaciones de conflicto comenzando por un panorama desde un punto de vista lo más objetivo posible. Según la mirada de quien esto escribe, la mayoría de las tensiones se deben principalmente a la pugna por mayor poder y mayor control en las distintas zonas de influencia de potencias, corporaciones internacionales, gobiernos y organizaciones no gubernamentales para el dominio y la consecuente explotación económica “globalizada” que se diluye al compás de medidas inciertas en prevención de un situación sanitaria indeterminada.-
A todos estos factores que pugnan por el poder los denominaba Juan Perón “sinarquía internacional” .-
Muchos son los que quieren ver una gran conspiración uniforme que planifica y organiza el mundo a su antojo, pero esto no es así, la conspiración existe y no tiene sentido negarla, pero está formada por hombres y como todo lo que hacemos los humanos es imperfecto y puede fracasar, de hecho, fracasa casi desde su origen, porque no tiene en cuenta principalmente al hombre real y su libre albedrio. -
Pero veamos los conflictos concretos; aun cuando en apariencia el problema más acuciante es el avance de un virus sin fronteras, es solo uno de los principales problemas que afronta el mundo; es que la lucha por distintos bienes, fundamentalmente el petróleo, los minerales, que no son renovables y que son indispensables para esta sociedad en la que nos desarrollamos, y la competencia por el dominio de naciones regiones y el mundo entero deviene en conflictos de diversa complejidad.-
Comencemos por observar a la situación en medio Oriente hoy; La Guerra Siria es probablemente el conflicto más importante de la segunda década del siglo XXI, lo que empezó como unas protestas en 2011 derivó en una mini guerra mundial donde intervinieron los principales actores regionales y globales.
Es sin duda una de las guerras donde mejor puede observarse los nuevos métodos y doctrinas, tanto los de la “guerra irrestricta” de los teóricos occidentales, pero más de la doctrina Grozni o la del general Gerasimov de los rusos y esta última también aplicada por Turquía. La caracterización que hace Gerasimov de los conflictos militares contemporáneos es muy similar a la que hacía en 2013. La única novedad importante es su utilización de expresiones como “guerra híbrida” en una mirada muy diferente a la que hace Hoffman.
Recordemos es el “padre” del concepto, esta referencia a “métodos híbridos”, ausentes hasta ahora del léxico militar (oficial) ruso es lo que en el terreno es Siria y sobre todo en los combates de la provincia de, de Idlib, donde luego que las fuerzas gubernamentales de Siria recuperara la ciudad de Saraqib rusos y turcos suscribieron un alto el fuego. Al momento de escribir esto perdura precariamente.
Cabe decir que toda esta zona se encuentra en un conflicto complejo, siendo sus principales actores La República islámica de Irán, La intervención iraní en la guerra siria se ha basado en tres niveles, un frente importante dentro de su conflicto contra Estados Unidos, la guerra fría con Arabia Saudí y la lucha contra los salafistas, especialmente ISIS y los grupos asociados a Al Qaeda. Irán, que luego de la creación de Hezbolá, ha fomentado la creación de milicias afines en Iraq, Afganistán, Pakistán, Yemen (huthies), hasta las milicias suníes en Palestina como Hamás.
Teherán también pretende beneficiarse del desenlace de la guerra. Irán ha mostrado su deseo de explotar las ricas minas de fosfatos situadas en las proximidades de Palmira durante un período de 99 años, así como retomar la construcción del oleoducto que atravesaría Iraq hasta la costa de Siria.
Teherán también pretende beneficiarse del desenlace de la guerra. Irán ha mostrado su deseo de explotar las ricas minas de fosfatos situadas en las proximidades de Palmira durante un período de 99 años, así como retomar la construcción del oleoducto que atravesaría Iraq hasta la costa de Siria.
Estados Unidos, que pretendió disminuir la influencia de Irán en Siria y sus milicias chiíes, asesinando a el principal mentor iraní en la zona el Gral. Qassem Soleimani , con la ambición de participar de la reconstrucción de Siria como lo está haciendo con Iraq y disminuir la influencia de los iraníes en medio oriente, impulsando a sus socios Israel y Arabia Saudita en proyectos petroleros en el área.-
A partir de la muerte de Qassem Soleimani Irán ha ido perdiendo protagonismo en detrimento de Rusia. Recordemos que Moscú intervino directamente en la guerra en septiembre de 2015, inclinando la balanza definitivamente del lado gubernamental. La aviación rusa desbordó a los rebeldes, pero lo que dio el empuje final fue su habilidad para negociar treguas en infinidad de frentes para concentrarse en otros. Además de ser capaz de desactivar políticamente todas las iniciativas diplomáticas desde el exterior para intervenir en Siria. Por mérito propio Rusia se ha convertido en el principal interlocutor y mediador con las potencias regionales en toda esta gran área. –
Otro foco de conflicto armado lo constituye una guerra civil en Libia, que también es un productor de hidrocarburos, es en 2019, es cuando se consolidan los dos grandes bandos del conflicto; el Gobierno de Acuerdo Nacional de Trípoli y el Ejército Nacional Libio dirigido por Haftar el señor Haftar que tutela el Parlamento elegido y no reconocido en Tobrouk y domina la mayor parte del territorio y los recursos energéticos, tiene una oposición en el GNA, que no fue elegido en las urnas y es fruto del acuerdo fallido impuesto por la ONU en 2016, que con una operación llamada “Volcán de la Ira” pretende tomar el poder de Libia, con el respaldo de Turquía que incluso envió tropas para participar del combate. Haftar, por el otro lado, tiene el respaldo de Catar, además de Arabia Saudí, Egipto y Emiratos, además le apoyan la propia Francia y Rusia, que ha facilitado el despliegue de sus mercenarios privados. –
Como se puede ver, Turquía como potencia militar emergente y con clara vocación histórica, reivindicativa de su pasado otomano, y actual de liderazgo, es una estudiosa de Rusia y una entusiasta en aplicar la “doctrina Gerasimov” en todos sus conflictos de la experiencia acumulada por la visión de las revoluciones o primaveras árabes, ucraniana- Maidan, guerra de Irak y Siria, va a sacar con “praxis turca” una serie de herramientas bélicas al servicio de su estrategia nacional y de sus intereses nacionales.
Todo lo que estamos observando, los es mientras se discute en el mundo entero una “pandemia” y muchos países se distraen en aislar o no aislar a sus habitantes, en priorizar economía o salud, con una preocupación verdadera o ficticia según las circunstancias, mientras se producen enfrentamientos bélicos como los descriptos arriba, con más algunos otros como los de chinos e hindúes en las fronteras de ambos países o los movimientos de Estados unidos en casi los siete mares con sus flotas, a lo que en contrapartida los chinos se van adueñando paulatinamente del poder en el mar de su influencia y sudeste asiático y los rusos presionan a la OTAN con impresionantes maniobras en su fronteras.-
Pero en el mundo pasan otras cosas; Es Estados Unidos, en un enfrentamiento feroz dos facciones integrantes de la “sinarquía internacional” se disputan el poder al compás del virus chino, una aparece como liderada por el presidente Donald Trump, la otra por un presunto “magnate” George Soros, ambos socios cada uno de una facción del globalismo; forman parte de lo que hace años se llamaba “estrategia de las tensiones” y como siempre hemos dicho en el mundo y en los conflictos no hay ni buenos ni malos, sólo intereses.-
Marcos Kowalski.-
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