MANUEL Y MARTÍN
Autor: Juan Martín Perkins
Esta semana tuvimos feriados para recordar las muertes de dos gigantes de nuestra historia.
Sobre Martín Miguel de Güemes, no se dijo casi nada. Pensé que porque era un feriado a estrenar.
Con Don Manuel Belgrano apostaba a que sería distinto porque es el personaje preferido de los políticos.
Y los políticos, aunque la mayoría no lee nada, cuando empieza la campaña electoral, de repente pierden el pudor y usan todo para su beneficio de clave electoral.
Sin pizca de vergüenza, la ex presidente Fernández dijo que ella, seguramente, hubiera tenido algo con Manuel. No pude evitar imaginar a Manuel diciendo que él hubiera tenido algo con Fernández, ¡hoteles y cuentas en Seychelles! Pero eligió mantenerse lejos de la ambición golosa por el poder y el dinero.
Que bien le hubiera venido a Belgrano, que vivió con apremios económicos y murió en la pobreza, tener algo no? Pero lo mal habido no era para él. Eso, lo dejó bien claro.
No entiendo como los políticos actuales toman de ejemplo y añoran ser “amantes” de alguien que los mandaría a fusilar si se levantara de la tumba.
El presidente ni lo nombró, prefirió denunciar a Moyano sin siquiera cantar el himno o pasar por el monumento a la bandera… cosan que pasan, diría José Larralde.
Hace una semana, para el día del padre, amanecimos con apagón nacional. Para mi fue una buena experiencia que me ayudó a reflexionar.
Estuvo bueno no tener radio ni tele.
Ni te cuento, si te quedó el teléfono sin cargar y no tuviste otra que redescubrir a tu familia y comprobar que se puede conversar, leer, escuchar lo que tienen para decir tus hijos…. ¡se puede! Y son buena gente.
Hay tantas cosas para hacer y disfrutar cuando se acalla la voz idiota de la rosca y la chicana permanente. ¡Tantas cosas!
Te dicen que la política es la herramienta para transformar la realidad…¡felicitaciones! Lo están logrando. Iba a decir que lo que están consiguiendo es tan parecido al infierno que ¡CELEBRO EL APAGÓN! Pero después recordé a Martín Miguel y a Manuel y me dio vergüenza. De esa vergüenza que debería darle a los políticos que cobran desarraigo y canjean los pasajes de avión para hacerse de efectivo.
Pensé en Martín Miguel trasladándose a caballo agazapado tras el guardamonte como una exhalación invisible. O en Manuel organizando y dirigiendo el histórico y conmovedor éxodo jujeño.
Dije mejor no me quejo, cuando recordé al general agonizando recostado en un catre bajo una enramada de la cañada de Las Horquetas…
Es como que estoy viendo la vigilia de 500 gauchos orando por su general…que se muere.
Supimos ser el país bárbaro y salvaje que no tenía luz, computadoras, celulares ni medios de transporte pero daba hombres como Manuel Belgrano y Martín Miguel de Güemes.
Olvidarlos es una vergüenza que puede pasar de puro ignorantes pero usarlos y banalizarlos…eso si que es ordinario y ruin.
Mis respetos y recuerdo a los héroes que nos legaron esta Patria nuestra, regada con el sacrificio de su sangre.
Mi fastidio para los rosqueros baratos que nos hablan difícil sin decir NADA. Reyes de la chicana y la mentira que nos abruman con intrigas y especulaciones en su afán por obtener y conservar un pedazo de queso…cual ratones.
Honor y Gloria a Don Manuel Belgrano.
Honor y Gloria al gaucho general Güemes.
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"La Poncho Colorado" de Roberto Rimoldi Fraga.
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